El aficionado mexiquense al equipo de Atlas identificado como Martín aseguró que un niño que le prestó una playera del equipo Querétaro para evitar que fuera agredido durante la riña campal del estadio Corregidora le salvó la vida, por lo que le estará siempre agradecido.
En entrevista para TELEDIARIO, Martín explicó que viajó desde el Estado de México acompañado de su novia con el fin de ver el partido de la jornada nueve de la Liga MX entre Querétaro y Atlas, equipo del que es aficionado. Todo transcurría con normalidad, pero en el segundo tiempo en diferentes lugares del estadio comenzaron a reportarse peleas.
“El problema fue que ya de nuestra parte del lado derecho se empezó a parar la gente, los que realmente eran aficionados de Querétaro y Atlas, y por pánico de los golpes, de lo que estaba sucediendo, empezaron a entrar a la cancha; en ese momento fue cuando yo dije ‘tenemos que entrar por nuestra seguridad’, yo iba con mi novia y por protección de ella, y mía decidimos entrar al campo de juego”, dijo.
De acuerdo con Martín, el estadio Corregidora no contaba con seguridad, hecho que lo alarmó y que ocasionó que las riñas comenzaran a salirse de control, pues los supuestos aficionados del Querétaro ingresaron al campo y perseguían a los hinchas del Atlas, pese a que estos se quitaran o voltearan la playera.
Al percatarse que los aficionados del Atlas estaban siendo agredidos, Martín y su novia corrieron por el campo de juego, hasta que fueron acorralados por los presuntos hinchas del Querétaro en la zona de las bancas.
“Al ver que no había piedad sobre niños, mujeres, ahí fue cuando realmente empecé a preocuparme por mi vida, por la integridad física de mi novia y empezamos a tomar decisiones a como nos iba llevando la situación. Tuvimos que brincar al espacio que divide la cancha y las gradas (hay como un desnivel, como un pasillo que recorre todo el estadio) y pues tuvimos que brincar ahí y empezar a correr por ese sitio; lamentablemente ahí nos empezaron a arrojar hieleras, baldes de agua, no sé de dónde salieron piedras, las mismas butacas; una persona atrás de mí recibió el impacto de una butaca que lo mandó al suelo”, comentó.
Tras correr por la fosa del estadio, Martín y su novia subieron nuevamente a las gradas, lugar en el que se encontró a más personas con la playera del Querétaro, a quienes les explicó que eran una familia y que no querían hacerle daño a nadie. El joven se percató que en esa zona del inmueble se encontraban familias que apoyaban al equipo local, mismas que se encontraban notablemente preocupadas.
“Yo viendo a las personas, pues eran familias que estaban preocupadas, niños llorando, ellos con las playeras del Querétaro que realmente eran los aficionados del Querétaro que estaban muy preocupados por esta situación”, dijo a TELEDIARIO.
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Cuando se encontraban en dicha situación, un niño se le aceró a la pareja, se quitó de su playera del equipo local, se la entregó a su padre y éste se la dio a Martín, con el fin de que pasara desapercibido por los presuntos aficionados del Querétaro.
“Ahí es cuando este niño, que me ayuda que no sé si al ver mi cara y la preocupación de mi novia, él toma la decisión por sí solo de quitarse su playera, dársela a su papá y entregármela para yo poder salvarme y poder ponerme una playera de Gallos y que mi integridad física fuera salvada”, explicó.
El aficionado detalló que portaba una playera gris del equipo Atlas, hecho que sospecha pudo haberlo ayudado a pasar desapercibido por los presuntos aficionados del Querétaro que estaban participando en la riña; sin embargo, destacó que el escudo del equipo se podía ver pese a que se volteó la playera al ingresar al terreno de juego.
Tras ser apoyados por el niño queretano y su familia, Martín y su novia permanecieron cerca de una hora en el estadio Corregidora, siendo testigo de las agresiones de la riña.
Martín y su pareja fueron ayudados por la familia del niño que le regaló su camiseta e, inclusive, les ayudaron a salir del estadio y encontrar su vehículo, el cual habían perdido por el caos de la situación, por lo que el joven aficionado del Atlas destacó que les estará agradecido por siempre.
“Les voy a estar eternamente agradecido. Yo que soy un aficionado del Atlas, sé que nuestra playera tiene un valor sentimental, tiene un valor de colores y el hecho de que ese niño me haya entregado su playera y me haya confiado esa responsabilidad es algo que valoro mucho (…) realmente ese niño me salvó la vida”.
Finalmente, Martín explicó que, por medio de redes sociales, se encuentra intentando encontrar al niño que le ayudó regalándole su playera para agradecerle, pues por la naturaleza de la riña se olvidó de preguntarle su nombre o el de sus padres.
KT