En la Sierra Norte de Puebla, la puntualidad jamás es un pretexto, debido a que en Zacatlán de las Manzanas se encuentra un espacio único donde, segundo a segundo, desde hace más de cien años se ha escrito historia; los Relojes Centenario han llegado a casi todo el país, además, en el extranjero se sabe que son signo de garantía mexicana.
Entre los muchos logros que se le puede atribuir a la fábrica y también museo de relojes que fundó el señor Alberto Olvera Hernández en 1918, está haber exportado relojes monumentales para algunas de las ciudades más importantes del país, por lo que en la actualidad, casi en toda la República Mexicana existe un ejemplar de manufactura poblana.
Tan sólo hace unos meses, Relojes Centenario creó y llevó hasta Villa Hermosa, Tabasco, un reloj monumental floral de 12 metros de diámetro, en el que, por petición de los solicitantes, los doce números tradicionales fueron sustituidos por las doce letras de “V-I-L-L-A-H-E-R-M-O-S-A”.
Otras ciudades como Mexicali, Estado de México, Guadalajara, entre otros, pueden presumir tener uno de los Relojes Centenario, que a través de la perfección en manufactura y procesos creativos, hoy pueden ser una realidad en aproximadamente dos meses.
Sin embargo, el talento de Zacatlán no es exclusivo de México, pues países como España, Chile, Honduras y Panamá, entre muchos otros, ya lucen majestuosos relojes de esta comunidad. El último envío registrado a la fecha fue el reloj floral de Costa Rica, que con sus diez metros de diámetro embellece una de las plazas más importantes de aquel país.
Relojes Centenario, un orgullo de Zacatlán
A decir de Andrea Sánchez, empleada de esta relojera, la fabricación de estos relojes son un orgullo de Zacatlán y ha convertido al pueblo mágico en un referente en toda la Sierra Norte de Puebla, así como en México y muchos puntos del planeta, algo que califica como algo "digno de presumir".
“Relojes Centenario ha causado un impacto en el estado, en gran parte de país y el extranjero. Ya que de otros lados del país vengan y quieran tener algo de nuestro trabajo en sus municipios o ciudades, si es algo que nos llena de orgullo como zacatecos. Y, como mexicanos, el salir al extranjero y entregar proyectos importantes si es algo sumamente bonito”, señaló Andrea, quien apunta que es importante promover este tipo de empresas que no solo han generado empleos dignos por décadas, sino que también, ponen en alto a México.
Museo del reloj en Zacatlán
Por si la exposición de cada pieza fuera poco para mostrar el trabajo de
Relojes Centenario, actualmente la fábrica ubicada en la calle Nigromante, en el centro de Zacatlán, también cuenta con un museo que, de forma anual, recibe un promedio de hasta 50 mil visitantes locales y extranjeros registrando cerca de 113 mil visitantes en un año.
Dentro de este museo los turistas pueden conocer los misterios, secretos y la ciencia detrás del tiempo y la evolución de los relojes, el arte que hay en cada pieza y lo que estos han significado para la humanidad.
Sin embargo, la revolución mecánica y de los engranes no concluye ahí, pues también los fines de semana, de viernes a domingo, los visitantes e incluso aquellos que se encuentren en la parte exterior de este inmueble, pueden asombrarse con “Los Autómatas de Centenario”.
Un grupo de máquinas creadas por la familia Olvera, que salen de la fachada con vestimentas tradicionales de diferentes puntos del país como Puebla, Guadalajara, Veracruz, Oaxaca y otros, para después moverse al ritmo de la música en un espectáculo que ya es un referente obligado en Zacatlán.
AGA