Restauranteros y comerciantes de Gómez Palacio de nueva cuenta se unen para apoyar a los laguneros y en esta ocasión decidieron regalar botellas de agua y paletas de hielo de frutas en el crucero del bulevar Ejército Mexicano y Rebollo Acosta con el fin de ayudar a mitigar los estragos de la ola de calor en peatones, ciclistas, motociclistas y automovilistas que tienen que movilizarse en las horas de mayor intensidad de los rayos del sol.
Osiel Puentes Briones, propietario de un restaurante en la zona señaló que al observar las inclemencias que sufren los laguneros entre una y tres de la tarde, y vivir los estragos del intenso calor en carne propia decidió regalar agua embotellada previamente enfriada con hielo para que los laguneros puedan refrescarse durante sus traslados por la ciudad.
“Siempre andamos ahí de inquietos con cualquier situación que se enfrenta en la Comarca Lagunera, estamos repartiendo botellitas de agua y paletas de hielo para ayudar a combatir un poco las altas temperaturas considerando que en la región existen muchos vehículos que no cuentan con aire acondicionado, las rutas del transporte también son muy calientes y en las carreteras la sufren motociclistas, ciclistas y los transeúntes”, compartió.
A la iniciativa que inicio con su familia se han ido sumando amigos y comerciantes, por lo que en un par de semanas han repartido más de mil 500 botellas de agua y 500 paletas de hielo, y espera continuar todos los martes durante la temporada de verano.
“La idea nace de que como siempre andamos en la calle trabajando y el calor te supera dándote sed y nos ponemos ahora si en el lugar de las personas que tienen que andar todo el día, y aunque nos toca andar un rato es el tiempo suficiente para darte cuenta que el calor es insoportable”, manifestó.
El entusiasta lagunero ha buscado mantener la empatía con la población, pues durante la pandemia en que el encierro afectó el ingreso económico de las familias, repartieron alimentos de manera gratuita a la población, ahora buscan que las personas pasen un momento más cómodo en las calles.
“Sería imposible no darnos cuenta en las necesidades del día a día, sabemos que con una botella de agua no solucionamos sus problemas pero les hacemos pasar un momento agradable al pasar de un momento caluroso a un ambiente más amigable”, concluyó.