La miel es un fluido muy dulce y viscoso producido por abejas a partir del néctar de las flores o de secreciones de partes vivas de plantas. Estas sustancias son recogidas por las abejas, luego transformadas al combinarlas con sustancias propias, depositadas, deshidratadas y almacenadas en los panales para su maduración.
En la región los apicultores se encargan de que las abejas se concentren en un apiario para producir miel, ellos cosechan dos veces al año, la primera en la floración del mezquite que se da en el mes de abril y en la floración de la multiflora de los cultivos en el mes de agosto.
El proceso a seguir es sencillo y a decir de los apicultores también se puede realizar en casa, primero concentran a las abejas en una cámara de crías, en donde se reproducen y la abeja reina pone huevecillos en los bastidores.
Ahí, los bastidores centrales contienen la deposición de huevos mientras que los laterales la miel.
Para los apicultores ya es un trabajo sencillo
Posteriormente se colocan alzas con bastidores, en donde las abejas producen la miel y son justamente esos paneles los que se llevan al taller para extraer la miel ayudados de una máquina con movimientos centrífugos.
Aunque parece laborioso, los apicultores señalan que es un trabajo sencillo y que cualquier ciudadano puede hacer, colocando un criadero y un alza en la azotea de su hogar.
Es importante mencionar, que más allá de que las abejas producen la miel, su existencia es fundamental para la polinizacion y a su vez la vida humana, por lo que apicultores invitan a la ciudadanía a no tenerles miedo y respetar su camino cuando vayan de tránsito por la mancha urbana.