La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, informó que todavía no hay condiciones para el ingreso a la mina de Sabinas, Coahuila para rescatar a los 10 trabajadores que quedaron atrapados.
En la conferencia mañanera de Palacio Nacional explicó que las imágenes del dron submarino que comenzó a operar este lunes se pudo observar a través del Pozo 3 la lámina de agua, elementos sólidos y turbulencia, mientras que en el Pozo 4 ni siquiera pudo ingresar el aparato.
"Se llevó a cabo una videograbación logrando observar lo siguiente, se hizo contacto con la lámina de agua y se determina lo siguiente: no existen condiciones para el ingreso de cuerpos de búsqueda y rescate este lunes, se observó gran cantidad de elementos sólidos y turbulencia. El equipo permitirá más adelante videograbar las condiciones de galerías y pozos una vez que se hayan reducido los tirantes de la mina", expresó.
La funcionaria explicó que hasta el momento los pozos de la mina continúan inundados en diferentes niveles, el Pozo 1 tiene un tirante de 10.4 metros, el Pozo 2 de 11.3 metros, el Pozo 3 16.4 metros y el Pozo de Alivio 27.3 metros de inundación.
Sin embargo, se está reforzando el bombeo de agua para acelerar las labores de rescate registrando un promedio de salida de 328 litros por segundo con el apoyo de dos bombas y 603 trabajadores del gobierno.
"Estamos atendiendo a las familias de los mineros, estamos junto a ellos, atendiéndolos dando alimento, todos los servicios que requieran, ellos están serenos, tranquilos a la espera de que todo nuestro esfuerzo, nuestro trabajo concluya en noticia favorable lo más pronto posible", agregó.
En tanto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, insistió en que se está trabajando con bombas para extraer agua con lo que se espera iniciar las labores de rescate al interior de la mina a más tardar el próximo jueves.
"Se sigue avanzando ya podemos pensar que mañana, pasado mañana ya el tirante de agua va a ser de 1 metro y medio y van a poder entrar buzos y rescatistas, eso es para explicar lo que está sucediendo", finalizó.
Tanto la fiscalía estatal como la federal han abierto sendas investigaciones para buscar presuntos responsables del accidente.
La Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA) insistió en que no se pueden llamar accidentes a estos “desastres previsibles” porque, en su opinión, “son resultado de la corrupción, la ilegalidad y la impunidad en la que operan las empresas mineras en la zona carbonífera de Coahuila”.
Según denunció este colectivo en un comunicado había evidencia de que la mina se podía inundar porque la excavación presentaba filtraciones de agua pero los empresarios les ordenaron trabajar en esos pozos y las autoridades lo permitieron.
REMA denunció que en esa zona carbonífera se toleran “pésimas condiciones de trabajo". Lamentó, además, que la situación de las minas que sacan carbón para la empresa estatal Comisión Federal de Electricidad no haya mejorado siquiera después de que murieran 65 mineros en Pasta de Conchos, también en Coahuila, en 2006.
Con información de la agencia AP.
JVS