Un oso negro ingresó a una cabaña ubicada en la Ciénega de González, en el municipio de Santiago, donde pasó varios minutos explorando el jardín y la fuente de la propiedad.
El animal se mostró tranquilo mientras los residentes lo observaban y grababan su inesperada visita. Durante el encuentro, le ofrecieron comida e incluso interactuaron directamente con él, llegando a tocarlo y a tomarlo de la mano, como se evidencia en un video difundido por los mismos ocupantes de la cabaña.
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El incidente no dejó personas lesionadas ni daños en la propiedad, y el oso se retiró del lugar tras algunos momentos de convivencia. Por ahora, no se ha informado si las autoridades fueron notificadas sobre el avistamiento.
Este caso se suma a una creciente tendencia de avistamientos de osos en áreas habitadas, un fenómeno que especialistas atribuyen a la búsqueda de alimento y la pérdida de su hábitat natural debido al crecimiento urbano.
Avistamientos de osos se han vuelto común en Nuevo León
En las últimas semanas, la zona de Veredalta, en el mismo municipio, ha sido escenario de numerosos avistamientos de fauna silvestre, incluyendo varios osos y hasta un puma, lo que ha generado preocupación entre los vecinos y un llamado a extremar precauciones.
Cabe mencionar que también se han reportado otros avistamientos también en Monterrey, uno de los más recientes sucedió el pasado 6 de noviembre sobre el camino al diente, en el sector Lagos del Vergel, al sur de Monterrey.
En ese lugar, una mujer se dirigía a su trabajo cuando repentinamente observó a oso en la cima de un árbol de grandes dimensiones, momento que logró captar en video con su teléfono celular.
En su reporte, la mujer expresó que no era la primera vez que observaba al ejemplar de cerca, incluso lo calificó como un riesgo para los ciudadanos que caminan por la zona.
¿Qué hacer si veo un oso silvestre?
Encontrarte con un oso silvestre puede ser impactante, pero mantener la calma y actuar correctamente es crucial para tu seguridad y la del oso. Aquí tienes pasos clave:
Mantén la calma y evalúa la situación:
No corras: Huir puede activar el instinto de persecución del oso.
Mantén la distancia: Quédate a una distancia segura, al menos 100 metros, si es posible.
Identifica el tipo de oso: Las reacciones varían dependiendo de si es un oso negro o un oso pardo (grisáceo).
Evita provocarlo:
No lo alimentes ni te acerques: Darle comida o intentar interactuar puede ser peligroso y alterar su comportamiento natural.
Habla con voz calmada: Hazle saber que eres humano; no grites ni le hagas movimientos bruscos.
Evita contacto visual directo: El oso puede interpretarlo como una amenaza.
Retrocede lentamente:
Aléjate sin darle la espalda: Muévete despacio hacia un lugar seguro, como un terreno elevado o un vehículo, si es posible.
No dejes objetos cerca: Si tienes comida o una mochila, déjala en el suelo a una distancia segura para desviar su atención mientras te retiras.
Si el oso se acerca:
Mantente firme: Si parece curioso y se acerca, levanta los brazos para parecer más grande y haz ruidos suaves sin gritar.
Usa un spray contra osos: Si tienes uno, utilízalo solo si el oso está a menos de 10 metros.
En caso de ataque:
Si es un oso negro: Lucha con fuerza. Usa piedras, palos o cualquier objeto para defenderte.
Si es un oso pardo: Juega muerto. Cúbrete la cabeza y el cuello, y quédate boca abajo protegiendo tus órganos vitales.
Prevención en áreas de osos:
Haz ruido al caminar: Lleva campanas o habla para evitar sorprender a un oso.
Guarda la comida correctamente: Usa contenedores herméticos y mantenla lejos de tu campamento.
Sigue las recomendaciones locales: En áreas protegidas, consulta con guardaparques sobre la presencia de osos y las precauciones necesarias.
Respetar su espacio y actuar con precaución puede prevenir encuentros peligrosos.
mla