El Senado de la República entregó reconocimientos a los tres poblanos que participaron en la película Pinocho, dirigida por el cineasta mexicano, Guillermo del Toro.
En la cámara alta del Poder Legislativo federal de México, los senadores recibieron y homenajearon a los tres poblanos que intervinieron durante la producción y desarrollo de la cinta que narra la historia del títere de madera que desea ser un niño de verdad.
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Los artistas plásticos originarios de Puebla, Ángel Meléndez, Antonio Pedroche y Óscar Hernández, recibieron un reconocimiento por su trayectoria y su trabajo que se ha visto reflejado en la historia animada bajo la técnica de stop motion que está nominada al Premio Oscar 2023.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Organismos Internacionales, Nancy de la Sierra, felicitó a los tres poblanos que plasmaron su talento en la cinta que ha sido galardonada en los festivales de cine.
"En Sesión Ordinaria, Ángel Medel, Óscar Hernández y Antonio Pedroche, artistas plásticos poblanos que participaron en la creación de la película Pinocho, de Guillermo del Toro, recibieron un reconocimiento del @senadomexicano por su destacada colaboración en el filme. ¡Felicidades!"
Antonio Pedroche: poblano que creó escenarios para Pinocho
Antonio Pedroche Aguirre es uno de los tres poblanos que participaron en la producción de la película Pinocho de Guillermo del Toro, un filme que ha recibido la ovación de la crítica y el trabajo se ha visto reflejado en la temporada de premios del cine.
El joven oriundo del municipio de Atlixco diseñó y creó las maquetas en las que se desarrolló una parte de la historia del niño de madero que desea ser un niño de verdad.
Antonio Pedroche es un diseñador gráfico que adquirió los conocimientos en stop motion, técnica en que se realizó Pinocho. Su habilidad quedó inmortalizada en otros trabajos, entre ellos, 'Inzomnia', una cinta de animación del director Luis Téllez en el año 2017, que aún no ha sido estrenada, sin embargo, ello lo catapultó a la producción del cineasta Guillermo del Toro.
En 2020 se unió al ejército que hizo magia en el Taller de Chucho en Guadalajara, lugar en que concentró su ingenio para aportar los escenario del que, quizá es uno de los momentos cruciales dentro de la cinta, es decir, cuando Pinocho es recibido por un grupo de conejos en una especie de limbo después de la muerte. Una labor que fue desarrollada durante tres meses.
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