Ha pasado más de un mes luego de que el 19 de marzo Jaime Alan Escoto Patiño fue privado de su libertad por hombres armados, noche en que Polett Díaz, su prometida, lo vio por última vez, en la colonia Lomas de Independencia, de Guadalajara.
Fue alrededor de las 10 de la noche cuando Polett, Alan y un amigo suyo, fueron interceptados mientras iban a bordo del vehículo.
Polett y el amigo de Alan lo describen como un joven de 28 años tranquilo, responsable y comprometido con su trabajo, una persona que prefería estar en su hogar, ya que no le gustaba asistir a las fiestas ni beber alcohol.
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“Veníamos de cenar y yo venía conduciendo en la colonia Lomas de Independencia, fue cuando nos paramos porque estaban los costales en la calle. Él me dice que mejor va a manejar, porque ya estábamos perdidos y cuando nos cambiamos en eso llegan dos personas armadas, nos dicen que nos bajemos, que se va a ir con otra persona y su amigo que iba atrás, nos bajan, nos ponen en una pared”, explicó Polett.
La familia de Alan se encuentra más unida y fuerte que nunca, a pesar de que están enfrentando un proceso que describen como doloroso, ya que el hermano del joven, es uno de los integrantes más allegados a él, y está afectado.
Sin embargo, los familiares de Alan continúan manteniendo la esperanza, así como las ganas de combatir, luego de que afirman que las autoridades no muestran ningún avance o información, a pesar de que se les han entregado pruebas en diferentes ocasiones, así como videos y ubicaciones de teléfonos móviles.
“Pues que tenga fuerzas, que no se rinda que nosotros lo seguimos buscando que no piense que ya no lo vamos a buscar, que hasta que lo encontremos vamos a parar, y que lo amamos y lo extrañamos mucho todos en casa”, expresó Polett.
De acuerdo a la familia de Alan, piden a quien lo tenga, que se toquen el corazón, ya que confirman que el joven no ha hecho nada malo a nadie, y que lo único que buscan es que regrese a casa sano y salvo, así como también afirman que no realizarán denuncias.
AA