El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, confirmó que las recientes explosiones de coches bomba en Guanajuato se deben a una disputa territorial entre un cártel local y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
En la conferencia “La Mañanera del Pueblo” realizada desde Baja California Sur, García Harfuch explicó que estos ataques, aunque violentos y dirigidos contra autoridades locales, no pueden ser considerados como actos de terrorismo.
“En estas agresiones que ocurrieron en Guanajuato, la motivación principal es la disputa de territorio y control de la venta de droga, así como de hidrocarburos. El terrorismo tiene características específicas, como tintes ideológicos o religiosos, que no están presentes en estos casos”, explicó el secretario, enfatizando que la violencia responde a un conflicto interno entre grupos delincuenciales por el dominio territorial.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respaldó esta postura, descartando categóricamente que las explosiones en Guanajuato puedan catalogarse como actos terroristas.
“El martes explicaremos más a detalle qué significa terrorismo y cómo se diferencia de la delincuencia organizada”, dijo Sheinbaum, subrayando que el gobierno federal continuará actuando en coordinación con el estado para restaurar la seguridad y tranquilidad en la entidad.
¿Qué sucedió en Acámbaro y Jerécuaro?
El jueves 24 de octubre, se registraron ataques simultáneos con coches bomba en los municipios de Acámbaro y Jerécuaro, marcando un violento repunte de agresiones en la región. En Acámbaro, un coche bomba estalló frente al edificio de la Secretaría de Seguridad Pública, dejando tres policías heridos, uno de ellos en estado grave. Este ataque, efectuado en pleno centro de la ciudad, generó daños estructurales en el edificio y en propiedades cercanas, mientras que los heridos recibieron atención médica inmediata.
Pocos minutos después, en el municipio de Jerécuaro, un segundo vehículo explotó frente a las instalaciones de la Seguridad Pública Municipal. Aunque en este incidente no se reportaron heridos, sí hubo daños materiales en la infraestructura y en inmuebles aledaños. Las autoridades locales mantienen el área acordonada y la Fiscalía General de la República continúa recabando evidencias para la investigación.
Estos ataques han intensificado las acciones de seguridad en Guanajuato, donde ya se han desplegado alrededor de 300 elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.