El papel picado es uno de los elementos característicos de los altares y ofrendas que se colocan en las festividades del Día de Muertos, el cual se elabora de una forma especial en Tochimilco.
El Taller de Papel Picado Copantitla es un ejemplo de ello, ya que se utilizan técnicas tradicionales para que las personas puedan tener un producto de calidad, según detalló Sandra Arizamelco, quien es representante del establecimiento.
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En entrevista con TELEDIARIO, detalló que un valor agregado que tiene el trabajo que realizan es que el papel picado que ofrecen a los clientes puede personalizarse, al darles la opción de agregar el nombre de la persona a la cual se le dedica la ofrenda, frases e incluso figuras.
Asimismo, agregó que su trabajo cuenta con el valor de tener un trabajo manual detrás, ya que las únicas herramientas que se utilizan son una base de plomo y caladores.
“El papel lo personalizamos y por eso nos busca la gente; pueden encontrar cualquier tira de papel, y nosotros le podemos poner el nombre del difunto o la leyenda que nos soliciten”, expresó.
Detalló que desde hace ocho años se dedica a la elaboración de papel picado, siendo un oficio que aprendió de su esposo y que se ha ido heredando de generación en generación.
Por ello, expresó que los buenos resultados que se han tenido en la comercialización del producto representan un orgullo muy grande, ya que también es una actividad que realiza junto con sus hijos.
“Para mí es un orgullo poner en alto el apellido Copantitla, que desde los abuelos de mi suegro empezó esto. No creímos que pudiéramos tener los resultados que ahora tenemos; no imaginamos que la demanda fuera tanta”, dijo.
En este sentido, señaló que le gustaría que, en un futuro, el papel picado que elaboran vaya tomando mayor relevancia y llegue a más público.
De esta manera, el papel picado elaborado en Tochimilco se coloca como un elemento inigualable para que los poblanos puedan colocarlo en sus ofrendas durante las festividades del Día de Muertos.
AGA