Señalando ser víctimas de una cacería injustificada por parte de los inspectores del Instituto Municipal del Transporte, un grupo de aproximadamente 40 taxistas bloqueó de forma temporal la vialidad frente al Congreso del Estado, exigiendo que se haga valer la ley de movilidad y transporte, y se sancione a los conductores que trabajan con aplicaciones como InDriver y Uber, que no se encuentran registradas.
Los conductores colocaron los autos sobre el bulevar Francisco Coss frente a la Presidencia Municipal y luego de varios minutos avanzaron hasta llegar al Congreso del Estado, donde permanecieron obstruyendo los carriles de circulación de poniente a oriente, ante la presencia de elementos municipales, que cerraron la vialidad desde el cruce con la calle Emilio Carranza.
Los inconformes se retiraron señalando que esperarían el llamado de las autoridades para retomar el diálogo sobre las propuestas que habían presentado sobre los operativos contra los conductores de los vehículos de aplicaciones.