De acuerdo con pobladores de Santiago Xalitzintla, ‘Don Goyo Chino Popocatépetl’ habría hablado con el tiempero para pedirle un anillo de oro a cambio de frenar su actividad eruptiva que tuvo mayor presencia a mediados del mes de mayo del 2023.
Esto fue cuestionado por otro sector de la población que rechaza este tipo de creencias, sin embargo, admiten que ya sea por los rituales o por cuestiones geológicas el volcán Popocatépetl, en efecto, frenó su actividad e incluso regresó a la fase dos del color amarillo en el semáforo de alerta volcánica.
México es un país rodeado de rituales y folclor que hacen que su cultura esté envuelta en el misticismo y las creencias que honran a los ancestros prehispánicos, esto se percibe sobre todo, en las comunidades con más población indigena.
Este es el caso de las comunidades que rodean al volcán, ya que tanto en San Nicolás de los Ranchos, cómo en Atlixco y Tochimilco habitan varias comunidades indígenas cuya lengua materna es el Náhuatl, que están acostumbradas a generar un contacto con la naturaleza a partir de rituales.
El Popocatépetl es uno de los volcanes más peligrosos del mundo, además de ser la segunda montaña más alta de México y por si fuera poco tener la característica de ser uno de los colosos más activos en la actualidad.
Aunque sus erupciones fuertes ocurrieron tiempo antes de la conquista española, esta actividad siempre ha causado temor a las personas que se encuentran más cerca, por lo que se han generado danzas y rituales para propiciar una buena relación y evitar una catástrofe.
Con la actividad registrada entre el 19 y 21 de mayo, los pobladores de Santiago Xalitzintla comunidad poblana, perteneciente al municipio de San Nicolás de los Ranchos, afirmaron que ‘Don Goyo’, como llaman al volcán, se encontraba molesto debido a que el pasado 12 de marzo no le realizaron una fiesta como en años anteriores.
Debido a que la costumbre indica que cada 12 de marzo con motivo del cumpleaños del Popocatépetl se debe subir al sitio conocido como el “ombligo”, que es una cueva que se ubica en una de las laderas del volcán para presentar una ofrenda que incluye, flores, comida, cruces y uno que otro ‘capricho’ del festejado.
Estos detalles son anunciados por el tiempero, previo a la ceremonia, debido a que de acuerdo con las creencias él es el único que puede comunicarse con la montaña.
El objetivo del ritual es ofrendar al volcán para que se mantenga estable y por otra parte pedir lluvias y fertilidad para las cosechas.
De acuerdo con las versiones en torno al último episodio de actividad volcánica se sabe que el tiempero Antonio Analco visitó a ‘Don Goyo’ para preguntarle que necesitaba para calmar la erupción, y este pidió un anillo de oro a cambio.
La sorpresa de las personas que no creen en estas actividades fue que tras la entrega de la petición el coloso frenó su actividad.
Aunque la versión científica indica que aunque la actividad fue intensa no existió formación de un domo de lava, lo que implicaba que el coloso se mantenía en una actividad moderada que difícilmente elevaría su nivel al no existir un ‘tapón’ que impidiera las exhalaciones.
ERV