Los residentes de Lomas de San Miguel en Tlaquepaque viven días llenos de incertidumbre. Desde la explosión del 24 de octubre, han estado fuera de sus viviendas, sin saber si podrán recuperar su patrimonio. Han pasado casi tres semanas, y la situación sigue sin esclarecerse.
Marco Antonio Cortés, uno de los afectados, expresó su preocupación. Aunque las casas dañadas fueron apuntaladas, la falta de información oficial y la demora en las acciones han aumentado el estrés de las familias. "No estamos buscando apoyo económico, solo queremos claridad sobre el destino de nuestras viviendas", señaló.
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¿Qué piden los afectados a las autoridades?
Los afectados exigen agilidad en el proceso de dictamen. Gabriela Romero destacó la lentitud en el procedimiento y señaló que Protección Civil solo revisa las estructuras, pero no da soluciones concretas. "Es que no han dicho ninguna fecha estable", comentó, enfatizando la urgencia de una respuesta.
El temor a que las estructuras colapsen mantiene a las familias preocupadas. Brian Humberto Quintero compartió que Protección Civil les pidió contratar arquitectos particulares para evaluar sus viviendas. "Tenemos miedo de que el techo colapse", explicó, evidenciando el impacto emocional de la situación.
Mientras tanto, la vivienda más afectada, ubicada en el número 906-2, muestra daños evidentes, obligando a sus residentes a buscar refugio temporal. Aunque el DIF de Tlaquepaque ofrece apoyo psicológico, las familias no han recibido ayuda económica, lo que complica aún más su situación.
¿Qué medidas se han tomado hasta ahora?
Hasta el momento, Protección Civil ha apuntalado algunas viviendas y revisado las estructuras, pero las acciones han sido insuficientes.
Las familias afectadas esperan una solución definitiva, ya que vivir en incertidumbre es cada vez más insostenible. Exigen celeridad y apoyo de las autoridades para enfrentar esta crisis.
MQ