El feminicidio de la influencer Valeria Márquez ha causado impacto en miles de personas en los últimos días, y es que la joven influencer que contaba con cerca de 100 mil seguidores sufrió una muerte repentina mientras hacía una trasmisión en vivo.
Debido a la grabación que se realizaba en la plataforma Tik Tok, varias personas fueron testigos del momento en que la influencer fue atacada, desafortunadamente las imágenes de lo sucedido aún siguen trascendiendo por medio de las redes sociales.
¿Por qué no difundir el video a través de las redes?
Es probable que, sin pretenderlo, te hayas podido topar con el terrible video de lo ocurrido con Valeria; sin embargo, lo mejor es ser respetuosos y prudentes ante estas imágenes, evitando continuar su difusión.
Es importante entender que, compartir videos e imágenes de abuso o violencia no son una forma adecuada de denunciar, y mucho menos son una justificación para compartirlas. El compartir imágenes violentas se convierte más bien en la revictimización de la persona afectada.
¿Por qué evitar la revictimización?
Difundir imágenes de violencia ejercida sobre alguien hace que las personas cercanas a esta vuelvan a presenciar detalles acerca de su muerte, lo que puede añadir aún más dolor sobre la pérdida del ser querido.
Además, difundir este tipo de videos invita a pensar en las víctimas como un escándalo más en las redes sociales, despersonalizándolas y opacando las historias y momentos que hay detrás de ellas.
Todos tienen derecho a la dignidad
Toda persona tiene derecho a la dignidad humana, tratándose de un valor inherente y reconocido dentro de todo ser humano, mismo que indica que deben ser tratados con respeto y consideración, sin distinción alguna.
La dignidad humana es un derecho que nos invita a tratarlos a todos, en especial a las víctimas y sus familias, con el mayor respeto posible, con consideración y empatía.
Finalmente, México es una nación fuertemente azotada por la violencia, situación que desafortunadamente contribuye a ser menos sensibles con este tipo de acontecimientos. Por lo que difundir contenidos violentos en redes sociales solo alimenta la normalización de la violencia, desensibilizando y alterando la percepción de la gravedad.
LG