En Guanajuato, la falta de lluvias y las intensas temperaturas han disminuido la venta de pan hasta un 20 por ciento, según detalló Óscar Raúl Arias Marquez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (CANAINPA) delegación Guanajuato.
Aunque es usual que las ventas del pan bajen entre los meses de marzo a junio, en este año, la situación es preocupante para el sector, pues según Arias Marquéz las épocas de lluvias son esperadas por los productores ya que con ellas las ventas se vuelven a recuperar; sin embargo, las precipitaciones no se han hecho notar, por lo que esto ha generado que tanto la venta de pan dulce y salado como el bolillo merme la recuperación de este sector.
"Sí, yo creo que un 20 por ciento, antes empezaba a llover en junio o julio y ya estamos en agosto y no ha llovido ha sido muy esporádico", explicó el presidente de la CANAINPA.
El presidente explicó que luego de los estragos que dejó la pandemia por covid-19 y el incremento de los costos en los productos de la canasta básica por la inflación como lo son las harina; huevo; leche; aceite y gas las ganancias no se han podido recuperar en su totalidad, esto en comparativa con años anteriores.
Entre otras cosas también detalló que los empleos apenas y se han mantenido a flote pues se tuvieron que apegar a diferentes métodos de trabajo en los que no se vieran tan afectados los trabajadores.
"Si pues realmente un aumento muy elevado hace un año apenas, entonces se ha venido ajustando pero muy levemente pero lo que sí se ha buscado mucho es mantener la calidad del producto y también mantener los costos para que también la población no los deje de consumir", dijo.