Alejandra Guadalupe Campos Lomelí desapareció el 3 de marzo de 2022, cuando salió de un consultorio médico ubicado en la colonia Villa Verona del municipio de Zapopan; desde entonces sus familiares no saben nada de su paradero.
De acuerdo con la hermana de la víctima, Alejandra acudió a un hospital llamado Innovar en el municipio de Zapopan, al cual asistió por una cita de chequeo tras estarse recuperando de una cirugía. Sin embargo, Alejandra jamás regresó a casa.
“El hospital se llama Innovar, tenía su cita y fue ahí de donde ya jamás volvemos a verla, de ahí desapareció […] Sí llegó a su cita, yo hablé con la recepcionista del doctor, me dijo que sí llegó, salió muy bien y ya de ahí ya no supimos más”, narró la hermana de Alejandra.
Alejandra tiene 29 años y es madre de una niña de dos años, la cual fue cuidada por su hermana el día que desapareció.
Según su hermana, Alejandra no había salido de casa en al menos 4 meses ya que se estaba recuperando de una cirugía y agregó, que la víctima no es una persona que le guste salir de fiesta, tomar o drogarse, por ello les parece extraña su desaparición.
“Ella no es una muchacha que le guste salir de fiesta o que tome o se drogue mucho menos, se nos hace muy extraña esta situación porque qué le pudo haber pasado, no se la pudo haber tragado la tierra”, mencionó la hermana de Alejandra.
A más de dos meses de su desaparición, de acuerdo con familiares, la Fiscalía de Jalisco no ha presentado avances o pruebas que aporten información del paradero de Alejandra Guadalupe Campos Lomelí.
“Yo les pido, les suplico que me la regrese quién quiera que la tenga. Si ya no está, que me digan en dónde encontrarla, es lo único que quiero porque tengo mis manos vacías. Le lloro al aire, necesito saber de ella”, expresó la hermana de la víctima.
El día que desapareció Alejandra usaba un vestido negro hasta la rodilla con una chamarra de mezclilla y tenis blancos, su estatura es de un metro con 68 centímetros y su cabello es largo en color negro. Cómo seña particular cuenta con un lunar del lado derecho de su boca y una cicatriz pronunciada sobre su abdomen.
Su familia no busca culpables, sólo exigen que se les diga en dónde está su ser querido y qué fue lo que le pasó, ya que se dicen angustiados de no saber si come o duerme bien, además afirman que es muy desesperante no saber de Alejandra.
MRG