TORONTO.- El Royal Ontario Museum de Toronto inauguró una gran exposición de arañas vivas y disecadas, que incluye 400 especímenes de las 48 mil diferentes especies de arañas que se tiene conocimiento y explica cómo estos animales han sobrevivido 300 millones de años, más que los dinosaurios.
Esta es la primera vez que el museo, que en anteriores muestras ha exhibido un esqueleto de ballena gigante, muestra ahora animales vivos. En total son 18 diferentes tipos de arañas vivas, incluyendo tarántulas y otros arácnidos.
A través de videos, proyecciones multimedia y módulos interactivos el visitante puede experimentar estar rodeado virtualmente de estos animalitos de ocho patas.
Además de presentar su danza ritual de cortejo, su cambio de piel y reproducción, la muestra incluye una capa dorada hecha de telaraña e información de cómo se utiliza científicamente su veneno.
Desarrollada originalmente por el Australian Museum, la exposición “Arañas: miedo y fascinación" se estará exhibiendo en el ROM hasta el 6 de enero de 2019 con actividades paralelas.
Antes de la era de los dinosaurios ya existían estos arácnidos, que han sobrevivido más de 300 millones de años gracias a su telaraña y a su veneno.
Especies como la viuda negra, tarántula, la amarilla de jardín, arañas del desierto, la albina goldenrod crab, Peacock, Hobo y cientos de diminutas arañas son exhibidas aquí, incluyendo un fósil descubierto en Argentina en 1980 y que había sido aclamado como el fósil de araña más grande, pero recientes investigaciones comprobaron que se trata de un tipo de escorpión marino.
El actual récord de la araña más grande es un fósil de hace 165 millones de años conocida como Mongolarachne jurassica. Las arañas de las cuevas de Tasmania han vivido por 200 millones de años y sus largas patas, que llegan a medir 18 centímetros las convierten en unas de las más grandes de Australia.
A diferencia de los insectos que tienen seis patas y antenas, estos arácnidos de ocho patas y dos o más ojos, sin antenas pertenecen al grupo de los arácnidos, junto con los escorpiones, garrapatas y ácaros. Son las únicas creaturas que producen telaraña.
La telaraña les sirve como protección frente a otros depredadores, para atrapar a su presa, atraer a su pareja y albergar sus huevecillos.
Unos tejedores de Madagascar realizaron en 2011 una gran capa dorada con telaraña, la cual es parte de esta exhibición junto con un video de cómo fue elaborada durante tres años con más de un millón de telarañas.
Con sus diferentes colores, formas y tamaños estos arácnidos tienen la capacidad de camuflajearse e, incluso, imitar a otros animales, como escarabajos y hormigas, para sobrevivir.
Algunas especies como la viuda negra se comen a su pareja después del apareamiento, mientras que otras se entregan como primer alimento de sus crías, las que tardaron entre pocas semanas o años en nacer.
El veneno de las arañas ha sido estudiado por los científicos para crear lo mismo insecticidas para tratamientos de enfermos de dolores crónicos, epilepsia, corazón y otras enfermedades.
La muestra se enfoca en romper los mitos en torno a las arañas, como la tarántula que “muy pocas veces pica” y que el veneno es letal para el ser humano cuando equivale a las molestias de la picazón de una abeja. “Entre más aprendemos de las arañas, menos les tememos”, señalaron los curadores.
De entre las causas de muerte de canadienses en 2012 el cáncer, diabetes y enfermedades del corazón ocupan los tres primeros lugares, cuando la picadura de araña no causó ninguna fatalidad humana.
Esta divertida y retadora muestra para quienes sufren de aracnofobia concluye con un segmento sobre la influencia de las arañas tanto en vasijas y textiles indígenas como en la cultura moderna con la primera edición del comic del Hombre Araña.