En las últimas temporadas, los Astros de Houston se han convertido en una de las franquicias más importantes en las Grandes Ligas al ganar la Serie Mundial 2017 y llegar nuevamente al Clásico de Otoño en el 2019, pero sus éxitos han sido cuestionados por la especulación del robo ilegal de señales.
Este martes aumentó la polémica cuando Ken Roethensal de The Athletic reveló en un reporte que el ex pitcher de los Astros, Mike Fiers aceptó que en el 2017 utilizaron una cámara para grabar las señales de los equipos contrarios.
Fiers señala que los Astros tenían una cámara en el jardín central y enviaba una señal a una televisión dentro del dugout.
"La señal de una cámara en el jardín central estaba enfocada en las señales del catcher, llegaba a un monitor que estaba en la pared del dugout en el Minute Maid Park, justamente en el tunel que va del dugout al clubhouse. Empleados y jugadores verían la pantaña durante los juegos para identificar las señales", le comentó Fiers a Rosenthal.
Durante la postemporada 2019, tanto los Yankees de Nueva York como los Rays de Tampa Bay cuestionaron si los Astros estaban interceptando las señales. El robo de señales ha sido una práctica tolerada en el deporte por muchos años; un corredor embasado en segunda base, por ejemplo, podría leer las señales del catcher y advertirle al bateador. Sin embargo, el uso de la tecnología para obtener una ventaja volvería dicha actividad en ilegal.
En las últimas temporadas, los Astros de Houston se han convertido en una de las franquicias más importantes en las Grandes Ligas al ganar la Serie Mundial 2017 y llegar nuevamente al Clásico de Otoño en el 2019, pero sus éxitos han sido cuestionados por la especulación del robo ilegal de señales.
Este martes aumentó la polémica cuando Ken Roethensal de The Athletic reveló en un reporte que el ex pitcher de los Astros, Mike Fiers aceptó que en el 2017 utilizaron una cámara para grabar las señales de los equipos contrarios.
Fiers señala que los Astros tenían una cámara en el jardín central y enviaba una señal a una televisión dentro del dugout.
"La señal de una cámara en el jardín central estaba enfocada en las señales del catcher, llegaba a un monitor que estaba en la pared del dugout en el Minute Maid Park, justamente en el tunel que va del dugout al clubhouse. Empleados y jugadores verían la pantaña durante los juegos para identificar las señales", le comentó Fiers a Rosenthal.
Durante la postemporada 2019, tanto los Yankees de Nueva York como los Rays de Tampa Bay cuestionaron si los Astros estaban interceptando las señales. El robo de señales ha sido una práctica tolerada en el deporte por muchos años; un corredor embasado en segunda base, por ejemplo, podría leer las señales del catcher y advertirle al bateador. Sin embargo, el uso de la tecnología para obtener una ventaja volvería dicha actividad en ilegal.