Aficionado de los Cachorros de Chicago se convirtió en villano tras quitarle una pelota a un niño que estaba sentando enfrente de él en el partido del domingo ante los Cardenales de St. Louis.
Los Cachorros al darse cuenta de lo ocurrido respondieron con entregarle una pelota autografiada por Javy Baez.
"Una pelota autografiada por Javy Baez debe remediar el problema", escribió la cuenta oficial de Chicago.