Omar González parecía estar aliviado mientras hablaba en el túnel debajo del estadio Rommel Fernández. Tras estar en el último puesto la semana pasada con un récord de dos derrotas al hilo, Estados Unidos repuntó al cuarto lugar al derrotar 6-0 a Honduras en casa y empata 1-1 con Panamá el martes en las eliminatorias mundialistas de la CONCACAF.
"Bueno, queríamos subir en la tabla, y creo que logramos eso en estos últimos 10 días", dijo el defensor. "Mostramos mucha más camaradería. Mostramos un espíritu de equipo que quizás no hemos tenido en mucho tiempo, así que creo que podemos avanzar en base a esto".
México lidera el hexagonal final de la confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe con 10 puntos, seguido por Costa Rica con siete, Panamá con cinco, Estados Unidos y Honduras con cuatro, y Trinidad y Tobago con tres. Los tres mejores equipos se clasifican al Mundial del próximo año en Rusia, y el cuarto equipo avanza a un repechaje en contra del país asiático que quede quinto en su región.
"Nos quedan tres partidos. Si ganamos nuestros partidos en casa y no sumamos ningún otro punto, llegaríamos a 13. En el pasado, ha sido suficiente para ir la Copa Mundial", dijo el portero Tim Howard. "Obviamente planeamos sumar puntos".
Los partidos se reanudan el 8 de junio, cuando Estados Unidos reciba a Trinidad, probablemente en Commerce City, Colorado, y los estadounidenses comienzan la segunda mitad de su calendario tres días después en México. Estados Unidos juega en casa contra Costa Rica y Honduras en septiembre, luego cierra el próximo mes con un partido en casa contra Panamá y otro de visita en Trinidad.
El equipo que terminó tercero sumó 15 puntos hace cuatro años, 16 en el 2009 y 2015, 17 en el 2001 y 14 en 1997.
"No vamos a clasificar en siete partidos", dijo el presidente de la Federación de Fútbol en Estados Unidos Sunil Gulati. "Así que estamos en buen camino. Ganamos terreno sobre todos, excepto México, y México ahora es un caso aparte".
En busca de que octavo pase consecutivo a la Copa Mundial, Estados Unidos abrió el hexagonal perdiendo 2-1 ante México y 4-0 ante Costa Rica, lo que provocó el despido del técnico Jurgen Klinsmann y el regreso de Bruce Arena, quien dirigió a los estadounidenses de 1998 al 2006.