José "Chepo" Reynoso ha sido una figura central en la carrera de Saúl "Canelo" Álvarez desde sus inicios. Con más de dos décadas de experiencia en el boxeo, Reynoso ha sido testigo y protagonista de la evolución en la preparación de un peleador amateur hasta la consolidación de un campeón mundial. En una charla con Reynoso, profundizamos en los cambios y retos que ha enfrentado a lo largo de los años.
Cuando Saúl Álvarez llegó con Reynoso en 2004, era un joven de apenas 14 años que soñaba con ser campeón. La preparación en ese entonces se centraba en lo básico, en las peleas amateurs y los primeros combates profesionales de cuatro rounds.
“No es lo mismo preparar a un muchacho en 2004 que ahora para peleas de título mundial. Las cosas han ido evolucionando poco a poco”, comenta Reynoso.
Hoy en día, la preparación de un boxeador de élite como Canelo involucra no solo a entrenadores y preparadores físicos, sino también a nutriólogos, psicólogos y hasta cocineros.
El enfoque integral es una de las mayores diferencias que destaca Reynoso en la actualidad.
“Al principio no teníamos un equipo tan completo, pero hoy en día es esencial tener a todas estas personas para alcanzar el máximo nivel de rendimiento”.
Asegura que las concentraciones previas a una pelea de título mundial son muy exigentes y que requieren de una preparación física y mental exhaustiva.
‘Chepo’ Reynoso busca inspirar a las nuevas generaciones de boxeadores
Aunque Reynoso ya no participa directamente en las intensas preparaciones de Canelo por cuestiones de salud, sigue dedicado al entrenamiento de jóvenes talentos en el gimnasio Julián Magdaleno de Guadalajara.
“Estoy en el gimnasio todos los días de nueve de la mañana a una de la tarde, trabajando con jóvenes de 15 a 17 años, buscando nuevas figuras”, explica.
Su compromiso es inspirar a la nueva generación de boxeadores que llegan al mismo lugar donde Canelo se formó.
Sobre la llegada de nuevos boxeadores al equipo de Canelo, Reynoso se muestra abierto pero reservado.
“Nosotros nunca decimos que ojalá y vinieran. Cada quien escoge donde quiere estar. Lo importante es que se sientan a gusto”, asegura.
Menciona a Marco Verde como un ejemplo de que, con esfuerzo y dedicación, se puede llegar lejos en el deporte.
La conversación con José Reynoso no solo refleja la evolución de las técnicas de entrenamiento, sino también el espíritu y la filosofía que ha guiado a uno de los entrenadores más importantes del boxeo mexicano.
“Cuando se quiere, se puede. Pero primero hay que querer y trabajar en lo que se quiere para lograrlo”, concluye Reynoso, dejando claro que, más allá de las técnicas y la tecnología, el corazón del éxito sigue siendo el trabajo duro y la determinación.
DR