El jugador sueco, Zlatan Ibrahimovic no fue inmune a las multas tras no tener los papeles en regla de su lujoso y poco convencional Ferrari.
Y es que desde el 30 de marzo el auto fue dado de baja voluntariamente, por lo que no contaba con el permiso para ser conducido por la ciudad sin antes pagar los impuestos correspondientes.
Sin embargo, Zlatan hizo caso omiso y condució el coche Ferrari Monza SP2, modelo que existe solo 199 veces más a nivel mundial, por una cantidad de 2 millones de euros.
Ante lo sucedido, el delantero del Milán deberá pagar una cantida de 110 a 190 euros si desea poder presumir su lujoso automóvil de nueva cuenta.