Gran polémica se ha generado en las últimas horas después de que se diera a conocer que las integrantes del equipo mexicano de softbol en los Juegos Olímpicos de Tokio habrían dejado sus uniformes en la basura de la villa olímpica.
La boxeadora mexicana Brianda Tamara denunció esta situación a través de sus redes sociales señalando que encontró estos uniformes en la basura, indumentaria que fue facilitada como parte de la delegación mexicana que participa en esta justa olímpica.
En la publicación, la boxeadora anexa evidencia de los uniformes encontrados en la basura, los cuales son justamente los que todos los atletas mexicanos recibieron previo a iniciar su aventura en Japón.
A su vez, Esmeralda Falcón, quien también ya debutó en Tokio 2020, se unió a las quejas en sus redes sociales, donde rápidamente comenzaron a llover las críticas para las seleccionadas de softbol.
"Quizá para algunos de los compañeros deportistas signifique: "nada" estos uniformes, para muchos otros representan nuestros años de trabajo, dedicación, amor y pasión. Que pena que el equipo de softbol mexicano no lo vea así", señaló Esmeralda a través de sus redes sociales.
Fue “para hacer espacio”
Después de la polémica que surgió ante este hecho, Rolando Guerrero, presidente de la Federación Mexicana de Softbol, defendió a las jugadoras y afirmó que ya no tenían espació en sus maletas por lo que tuvieron que dejar parte del equipo y de sus uniformes.
No obstante, la misma federación, previamente había mencionados que las jugadoras que sean identificadas como responsables de este acto no volverían a ser convocadas a la selección de softbol nacional.