El guardameta de Dorados de Sinaloa, Gaspar Servio, se voló la barda tras un épico tatuaje que se realizó en su pierna. El arquero decidió plasmar el rostro de su entrenador, Diego Armando Maradona, en su cuerpo de forma permanente.
“Creo en Dios”, fue la leyenda que acompañó la fotografía de su nuevo tatuaje donde se percibe la cara del ‘Pelusa’ con una amena sonrisa.
Parece que la admiración de Gaspar sobre el ídolo argentino no tuvo límites y fue mediante su cuenta de Instagram que decidió compartir este momento de su vida.