El arranque de Lamar Jackson ha sido explosivo. El pasador de 25 años desquició el domingo a la defensiva de los Pats en la victoria de Baltimore 37-26; acumuló 218 yardas por aire, conectó cuatro pases de anotación, más 107 yardas por carrera y un touchdown.
Jackson es líder de la NFL en envíos de anotación con 10 en tres juegos, uno más que Josh Allen y dos por encima de Tagovailoa.
El problema que representa para las defensivas rivales es que no basta con coberturas perfectas para que no encuentre a sus receptores.
El quarterback de Ravens también es una amenaza por tierra; es el cuarto jugador con más yardas en la liga, suma 243; el primero en yardas por acarreo, con 9.1; además presume dos anotaciones.
Antes del inicio de esta temporada Jackson desechó una extensión de contrato con Baltimore por 250 millones de dólares, de los cuales 133 estaban garantizados. La razón es que el mariscal de campo no quiere candados, ni restricciones.
Al rechazar esa extensión, en su último año de contrato de novato por el que ganará 23 millones de dólares en este 2022, Lamar corre el riesgo de quedar desprotegido si sufre alguna lesión.
"Sólo juego fútbol, cualquier cosa puede pasar. Dios no quiera que suceda algo malo", confió ante su apuesta más ambiciosa; tener un año meteórico que obligue a Ravens a cumplir sus expectativas y por lo visto hasta la semana tres los números están de su lado.
No menos deslumbrantes han sido las presentaciones de Josh Allen, de 26 años, y Tua Tagovailoa, de 24, incluida la del juego del domingo en el que los Dolphins vencieron 21-19 a los Bills a pesar de que Allen pasó para 400 yardas y conectó dos anotaciones.
Allen, Pro Bowl 2020, carga con la presión de liderar al principal favorito para llegar al Super Bowl LVII por la AFC, y hasta el momento no parece que la presión lo agobie.
El quarterback de Buffalo es el mejor de la liga en yardas aéreas con 1.014 en tres juegos, es el número uno en porcentaje de pases completos con 71.2 por ciento y sólo ha sufrido dos intercepciones en 132 envíos, de los cuales ha conectado 94.
A pesar de estas estadísticas encontró en los controles de los Dolphins a un oponente más joven que rompió el invicto de los Bills.
Tua Tagovailoa, tomado por Miami en la primera ronda del Draft 2020, obtuvo con la victoria sobre Buffalo el crédito que le faltaba para ser considerado capaz de llevar a los Dolphins a los Playoffs, a los que no clasifican desde el 2016.
En la semana dos, ante Ravens, Tua igualó el récord del equipo de seis touchdowns en un juego, marca que comparte con las leyendas de Dolphins; Bob Griese y Dan Marino, miembros del Salón de la Fama.
En dicho partido, en el que Miami venció 42-38 a Baltimore, Tagovailoa le ganó la partida a Lamar Jackson.
Las seis anotaciones y 469 yardas de Tua eclipsaron la destacada actuación de Lamar quien sumó 318 yardas por aire, tres envíos de anotación, más 119 yardas en acarreos y un touchdown por tierra.
Si estas actuaciones deslumbraron hay que frotarse las manos porque en la semana cuatro los Bills de Allen visitarán a los Ravens de Jackson, en un partido que promete corroborar quienes son los dueños del espectáculo aéreo en la NFL.
MN