Mauricio Pochettino, entrenador de la selección de Estados Unidos, no quiso utilizar las cinco bajas y el poco tiempo de preparación como excusa tras la derrota ante México, un resultado que puso fin a una racha de cinco años de hegemonía del conjunto estadounidense sobre el Tricolor.
El técnico asumió la responsabilidad del descalabro y destacó la importancia de aprender de esta experiencia.
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"Creo que no voy a poner excusas. Son decisiones. Cuando pierdes el partido y estás abajo, quiere decir que fueron mejores que tú, y debemos aceptarlo. Fue un juego competitivo, y necesitamos entender cómo competir en situaciones difíciles como la de hoy. No hicimos lo que debíamos, pero estamos tranquilos. Vimos a muchos jugadores, competimos, y debemos aprender de esto", declaró Pochettino tras el encuentro.
Para este importante enfrentamiento, Estados Unidos sufrió las bajas de jugadores clave como Ricardo Pepi, Christian Pulisic y Weston McKennie, quienes regresaron a sus respectivos clubes en Europa para retomar sus compromisos en las ligas locales. Estas ausencias fueron notables, ya que estos jugadores han sido piezas fundamentales en los éxitos recientes del equipo de las barras y las estrellas.
A pesar de las ausencias, Pochettino no dejó de reconocer el esfuerzo de los jugadores que entraron en su lugar, destacando que, aunque no son titulares habituales, hicieron todo lo posible por cubrir esos vacíos.
"Estamos contentos con lo que hicimos. Claro, las bajas nos dejaron con pocas opciones, muchos jugadores tuvieron que repetir en el campo, pero eso es lo que tenemos. Sin embargo, debemos mantenernos positivos. Es solo cuestión de tiempo para que tengamos a todos los jugadores centrados. Hoy los felicité porque hicieron un trabajo fantástico. Solo es un partido que perdimos contra México. Tenemos que ser positivos y necesitamos más juegos como estos para crecer como selección", añadió el estratega argentino.
Este encuentro marcó el segundo partido de Pochettino al mando de la selección de Estados Unidos, quien apenas el pasado sábado debutó con una victoria sobre Panamá.
A pesar de la derrota frente a México, el técnico se mostró confiado en el proceso de su equipo y en su capacidad para seguir mejorando. La derrota también pone en evidencia las áreas que aún necesitan ajustes para consolidar al equipo de cara a futuros compromisos.
El trabajo de Pochettino apenas comienza, y aunque este tropiezo ha generado preguntas, su enfoque en el crecimiento y el aprendizaje a largo plazo podría marcar la diferencia en el futuro de la selección estadounidense.