Los goles de Evanilson y Pepe dieron este martes la victoria al Oporto ante el Amberes por 2-0, lo que sitúa al equipo portugués en igualdad de puntos con el Barcelona, ambos con 9.
Victoria merecida pero gris del Oporto en un partido ante un Amberes -entrenado por el ex del Barça Mark Van Bommel- todavía poco acostumbrado a estas lides, que con su cuarta derrota consecutiva se queda sin opciones de seguir adelante en la Liga de Campeones.
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Fue necesario esperar un poco para que los "dragones" llegasen a la portería defendida por Lammens -el guardameta titular, Jean Butez, se quedó en Bélgica para estar presente en el nacimiento de un hijo-, dada la agresividad aplicada sobre el césped por el Amberes.
La dureza de los de Van Bommel logró anular a algunos de los más creativos del Oporto, como el argentino Alan Varela, pero fue la culpable del primer gol de los blanquiazules. Fruto de un penalti por un 'atropello' a Eustáquio anotado por Evanilson poco después de la media hora de juego.
Tanto Varela como el iraní Mehdi Taremi querían tener el honor de cobrar la falta, un debate finalizado por el capitán Pepe, ex del Real Madrid, que se hartó de la discusión de sus compañeros, entró en el área para quitarles el balón y se lo cedió al delantero brasileño.
La postura del Amberes en el Estadio do Dragão volvió a causarle daños, al ver Jurgen Ekkelenkamp la roja directa en el minuto 52 por una durísima entrada sobre el nigeriano Zaidu, que fue uno de los más masacrados por parte de los jugadores del campeón belga.
A pesar de tener diez sobre el terreno de juego, el Amberes se soltó un poco y provocó algunos escalofríos a los "dragones", lo que generó cierto descontento en las gradas, con la derrota en la pasada jornada liguera contra el colista Estoril (0-1) aún fresca en la memoria.
Un contraataque en el minuto 90 conducido por Arbnor Muja puso a los belgas muy cerca del empate, pero el disparo del albanés se marchó a centímetros de la portería blanquiazul, lo que incrementó el volumen de silbidos en el Dragão.
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Como ya había hecho con el penalti, Pepe se cansó y sentenció el partido.
El internacional portugués, de 40 años, superó a la defensa del Amberes y marcó de cabeza el segundo de su equipo tras un centro de Francisco Conceição al comienzo del tiempo añadido.
Pepe se convirtió en el jugador de más edad en marcar en la Liga de Campeones, un récord que antes pertenecía al italiano Francesco Totti.
La victoria deja al Oporto a un solo punto de clasificarse para la siguiente ronda de la máxima competición continental, un objetivo que intentará alcanzar en su próximo compromiso, previsto para el día 28 en Barcelona.
AM