El exjugador del Barcelona Dani Alves ha pedido a la jueza que lo investiga por la presunta violación de una joven en la discoteca Sutton de Barcelona que lo deje en libertad provisional, si es necesario bajo fianza, y ha insistido en que las imágenes de las cámaras de seguridad del reservado lo exculpan.
Según han informado a EFE fuentes jurídicas, el escrito se ha presentado durante la mañana de este jueves ante el juzgado de instrucción número 15 de Barcelona, que investiga al futbolista por violar supuestamente a una joven de 23 años en un baño de un reservado del Sutton el pasado 30 de diciembre.
La defensa de Alves, ejercida por los abogados Cristóbal Martell y Arnau Xumetra, ha vuelto a pedir la puesta en libertad provisional del futbolista, que la Audiencia de Barcelona ya rechazó en febrero, después de que el pasado lunes compareciera de nuevo ante la juez, a la que alegó que el sexo con la denunciante fue consentido y que mintió en su primera declaración para ocultar su infidelidad a su esposa.
Para salir de prisión, el internacional brasileño propone a la jueza que le fije la fianza que crea oportuna para garantizar que permanecerá en España hasta el eventual juicio y que le retire sus dos pasaportes, español y brasileño.
En el escrito, los abogados del futbolista adjuntan un informe pericial que han encargado sobre las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del reservado y que, según mantiene la defensa, demostrarían que el acusado y la víctima estuvieron coqueteando antes de los hechos, bailando y bebiendo juntos, y que ésta entró voluntariamente en el baño después de que lo hiciera Alves.
En concreto, argumentan los letrados que el informe, de 200 páginas y que analiza los imágenes fotograma a fotograma, desmiente el "microcosmos de pánico y terror" relatado por la víctima y apunta a que los veinte minutos que pasaron juntos antes de entrar en el baño "fueron propios de un galanteo sexual", según un comunicado que la defensa ha remitido a los medios.
También arguyen que las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del reservado contradicen el testimonio de las dos amigas que acompañaban a la denunciantes, quienes explicaron a la juez que el futbolista las abordó con evidente intención sexual hasta hacerlas sentir incómodas.
A esos argumentos la defensa añade que el futbolista dispone de suficiente arraigo en Barcelona, donde es titular de una vivienda, y que no tiene la capacidad económica que le atribuyó la juez instructora por las sociedades que tiene en su nombre en Brasil.
MPP