Kylian Mbappé hizo historia este domingo al ser elegido mejor jugador de la liga francesa por tercer año consecutivo, algo que nadie había logrado hasta ahora.
Mbappé recibió el galardón de manos de Thierry Henry en la trigésima edición anual de los premios de la Unión Nacional de Futbolistas Profesionales de Francia (UNFP), en la que dijo que la decisión sobre su futuro está "casi" hecha.
A falta de una jornada para concluir la liga, la estrella francesa del PSG acumula 25 goles y 17 asistencias en 34 partidos, lo que le coloca de forma simultánea como mejor goleador y mejor pasador en la misma temporada, algo inédito.
"Ganar una tercera vez seguida es increíble, gracias a todos los que han votado por mí", dijo Mbappé, quien agradeció a sus compañeros de equipo y a su entrenador por el apoyo que ha tenido esta temporada.
Ha sido "una temporada un poco difícil, pero hemos hecho nuestro trabajo y hemos logrado el campeonato" de liga, destacó.
Mbappé, que concluye su contrato con el Paris Saint-Germain (PSG) el próximo 30 de junio, rechazó dar detalles sobre su futuro y si dejará el club de la capital francesa para ir al Real Madrid.
Explicó que acudió a la gala para "participar en la gran fiesta del fútbol francés" pero no para llevarse el protagonismo. A preguntas de uno de los conductores de la ceremonia, dijo que hará el anunció "muy rápidamente", ya que la temporada está "casi terminada" y que su decisión "casi" está hecha.
Los otros nominados fueron el exsevillista Wissam Ben Yedder (Mónaco), el brasileño Lucas Paquetá (Lyon), Dimitri Payet (Marsella) y Martin Terrier (Rennes).
La gala se celebró de forma presencial en el Pabellón Gabriel, a dos pasos de los Campos Elíseos de París, después de dos años en blanco debido a las restricciones sanitarias por la pandemia.
A su llegada, Mbappé tuvo el recibimiento más ruidoso por parte de los aficionados, que lo acogieron como a una estrella de rock.
En el resto de categorías, Karim Benzema recibió el premio al mejor futbolista francés que juega en un equipo extranjero, que logra por tercera vez.
El italiano Gianluigi Donnarumma (PSG) se alzó con el trofeo al mejor portero, una categoría en la que también habían sido nominados el español Pau López (Marsella) y el argentino Walter Benítez (Niza).
Bruno Génésio se alzó con el galardón al mejor entrenador por su labor en el Rennes, una categoría para la que no fue nominado Mauricio Pochettino, que ha tenido una temporada poco brillante en el PSG pese a lograr la liga.
Sí fue nominado otro argentino, Jorge Sampaoli (Marsella), aunque no pudo alzarse con el trofeo.
Además, el defensa internacional del Olympique de Marsella (OM) William Saliba (21 años) ganó el premio a la mejor promesa.
Marie-Antoinette Katoto, atacante francesa del PSG, ganó el premio a la mejor jugadora de la temporada en la primera división del fútbol femenino.
Y la chilena Christiane Endler (Lyon) se alzó por segundo año consecutivo con el galardón a la mejor guardameta, después de haberlo logrado hace un año con el PSG.
A la ceremonia asistieron algunas viejas glorias de la liga francesa como el brasileño Ronaldinho (que estuvo sentado junto a Mbappé), Thierry Henry o Djibril Cissé.