El Inter, con un tanto de Lautaro Martínez, recuperó el liderato de la Serie A tras derribar 0-1 al Fiorentina, que desperdició un penalti en las botas de Nico González para empatar el encuentro en el último cuarto de hora.
El Inter jugó con fuego y estuvo a punto de quemarse. Rozó el pinchazo por especular con el resultado. Se echó atrás durante casi todo el encuentro y cedió el dominio al Fiorentina, muy inocente en los últimos metros. Y, con un cabezazo de Lautaro a la salida de un córner, sentenció el partido.
El pinchazo del Juventus (1-1 ante el Empoli), dio una oportunidad al Inter para recuperar el liderato que perdió hace tres jornadas. Entre la tercera y la vigésima, gobernó con mano de hierro la Serie A, pero el partido aplazado ante el Atalanta dio una oportunidad a la 'Vecchia Signora' de ocupar un hueco del que apenas ha disfrutado un par de semanas.
Y eso que el Inter no tenía un compromiso sencillo. El Fiorentina, pese a sus dos últimos pinchazos consecutivos (derrota ante el Sassuolo y empate con el Udinese), es un firme candidato a terminar el curso en uno de los seis puestos con acceso a Europa. Sus altibajos en los últimos duelos exigían una reacción de los hombres de Vincenzo Italiano.
Como consecuencia de esa necesidad, el Fiorentina consiguió hacerse con el gobierno de la pelota. Sobre todo durante la primera parte. Al Inter tampoco le importó. Jugó a otra cosa, a afilar sus puñales para despedazar a base de fogonazos a su rival con Lautaro Martínez y Marcus Thuram, los más insistentes y verticales.
En el acto inicial, el control del juego apenas sirvió al Fiorentina para marcar un tanto de Nzola M'Bala que fue anulado por fuera de juego y para rozar el gol con un remate de Giacomo Bonaventura que salvó Yann Sommer con una buena intervención. El resto de ocasiones, pese a no gozar de mayor posesión, las protagonizó el Inter.
Lautaro Martínez inauguró el carrusel de oportunidades. Muy pronto dio su primer aviso, pero Pietro Terracciano intervino a tiempo para evitar el primer tanto del Inter. Instantes después lo intentó sin éxito Thuram y finalmente, al cuarto de hora, fue el delantero argentino quien acertó con un gran remate de cabeza tras un córner lanzado por Asllani.
Fue suficiente para los hombres de Simone Inzaghi, que se marcharon satisfechos a los vestuarios. Con mucha eficiencia y sin exceso de brillo, consiguieron una ventaja muy valiosa para encarar el segundo acto.
Italiano reaccionó con la entrada en el terreno de juego de Maxime López. Sacó del campo a Arthur Melo en la búsqueda de más desequilibrio. No mucho después, apostó por Nico González. Quería más colmillo y en parte lo encontró. El Fiorentina fue más incisivo, pero dejó más espacios al Inter, cuya amenaza en cada contragolpe se olisqueaba desde la distancia.
Sin embargo, un puñetazo involuntario de Sommer a Bala Nzola dio una oportunidad al Fiorentina en forma de penalti. Nico González adquirió la responsabilidad y lo lanzó fatal. Flojo, al centro, fácil para Sommer, que lo detuvo para enmendar su error y mantener al Inter por delante en el marcador.
Pero aún restaba un cuarto de hora para el final. El Fiorentina intentó por todos los medios conseguir un premio a su dominio, pero el Inter se defendió bien. Aguantó las embestidas de su rival y terminó con una victoria que le sirve para recuperar el liderato de la Serie A.
MP