Rodeado por un clima de efervescencia tras la obtención del Mundial de Qatar, Argentina buscará ratificar en casa su hegemonía en la competencia más importante a nivel selecciones juveniles y que ha servido de semillero de grandes figuras como Diego Maradona, Lionel Messi y Erling Haaland.
En una sede que no era la original y con un anfitrión que no se había clasificado, la Copa Mundial Sub20 arrancará este sábado con 24 equipos, entre ellos los campeones continentales Brasil, Inglaterra y Senegal como otros grandes aspirantes a disputar la final el 11 de junio.
La Albiceleste es la máxima ganadora de esta categoría con seis títulos, uno de ellos obtenido en 2001 cuando organizó el certamen por primera vez. Maradona, Messi, Javier Saviola, Ángel Di María y Sergio Agüero, entre otros, dieron la vuelta olímpica como Sub20.
Sin embargo, los antecedentes cercanos no favorecen a los anfitriones. Argentina ganó por última vez esta competencia en Canadá 2007, torneo que cerró el proyecto de juveniles más exitoso ideado por José Pekerman. Luego se sucedieron ciclos erráticos, con cambios reiterados de entrenadores que se pagaron con ausencias en la máxima cita.
En el torneo clasificatorio de Sudamérica en enero, el equipo dirigido por Javier Mascherano finalizó octavo sobre diez equipos, un fracaso que llevó al técnico a poner la renuncia a disposición. Pero tres meses después, la FIFA le sacó la organización del Mundial Sub20 a Indonesia por negarse a recibir al debutante Israel y se la entregó al último campeón del mundo en mayores.
El país sudamericano ofrecía una estructura ya lista, pero sobre todo un entorno de hinchas apasionados que tras la conquista del máximo trofeo de mayores en Qatar arrasaron con las entradas para la juvenil.
“El hecho de que se juegue el Mundial en Argentina hizo que se precipite la decisión de continuar”, dijo Mascherano tras su confirmación en el cargo. “En el fútbol casi nunca tienes una nueva oportunidad como nos tocó a nosotros y trataremos de aprovecharla esta vez”.
Argentina debutará ante Uzbekistán, el campeón de Asia, el sábado en el estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero por el Grupo A que también integran Nueva Zelanda y Guatemala.
A diferencia del mundial de mayores, los clubes no están obligados a ceder jugadores para el Sub20, lo cual privará el certamen de varios juveniles que ya dejaron de ser promesa. Pero al mismo tiempo, esta competencia se ofrece como vidriera para otros menos conocidos que en poco tiempo reforzarán a los grandes equipos del mundo.
El local no dispondrá de Alejandro Garnacho (Manchester United), Nicolás Paz (Real Madrid) y Facundo Buonanotte (Brighton). Sin ellos, los reflectores apuntarán al lateral Valentín Barco (Boca Juniors), el volante Máximo Perrone (Manchester City) y el delantero Matías Soulé (Juventus).
“Ha habido cambios respecto al Sudamericano. La actualidad a esta edad va variando mucho. Creemos que los jugadores citados son los que están en su mejor nivel”, avisó Mascherano.
Brasil, la otra potencia de la categoría con cinco trofeos, viene precedido por el título en el clasificatorio sudamericano, pero se verá si la ausencia de su goleador Vitor Roque, figura de Atlético Paranaense, le quita poder de fuego. Tampoco contará con Endrick, su perla de 16 años que actualmente juega en el Palmeiras pero con futuro asegurado en el Real Madrid.
El capitán Andrey Santos, el mediocampista de Vasco da Gama que ya fichó Chelsea, es el barómetro del juego versátil y agresivo propuesto por el entrenador Ramon Menezes.
La Canarinha iniciará su travesía ante Italia el domingo en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza por el Grupo D que completan Nigeria, tradicional animador de esta categoría, y el debutante República Dominicana.
En las últimas cuatro ediciones, el torneo juvenil quedó en manos de europeos.
Inglaterra, campeón mundial en 2017, llega con la base de los ganadores del campeonato europeo Sub19 en 2022, entre ellos el volante Carney Chukwuemeka (Chelsea). Disputará un mano a mano por la primera posición de la zona E con Uruguay, subcampeón sudamericano.
La Celeste, finalista del Mundial Sub20 en dos ocasiones, extrañará a Álvaro Rodríguez, figura y autor de cinco tantos en el clasificatorio de enero, porque el Real Madrid lo negó. Sin él, los pilares del equipo será los delanteros Andrés Ferrari (Defensor Sporting y fichado por Villarreal) y Luciano Rodríguez y el mediocentro Fabricio Díaz (Liverpool de Uruguay).
Irak y Túnez completan el grupo que se disputará principalmente en el estadio Diego Maradona de La Plata, Buenos Aires.
¿Habrá revancha para Francia? El subcampeón mundial en Qatar buscará desquitarse con juveniles en la casa de su verdugo, pero primero deberá sortear el Grupo F que comparte con Corea del Sur (subcampeón de la categoría en el último mundial 2019), Honduras y Gambia.
Tras su tercer puesto histórico en 2019, Ecuador quiere ratificar con resultados el potencial de su semillero de juveniles. Uno de ellos es Kendry Páez, el volante del Independiente del Valle que jugará a partir del 2025 para Chelsea.
Los sudamericanos, el campeón de la CONCACAF Estados Unidos, Eslovaquia y Fiyi integran el Grupo B.
El Grupo C promete una disputa cerrada por la clasificación a octavos.
Senegal es el máximo favorito, precedido por una campaña perfecta en el clasificatorio de África, con el extremo Samba Diallo como revelación. Colombia, con el mediocampista ofensivo Óscar Cortés; Japón, otro histórico animador del certamen; e Israel le darán pelea.
Los dos mejores equipos de cada grupo y los cuatro mejores terceros avanzarán a los octavos de final. En instancia de eliminación directa, en caso de empate al final del tiempo reglamentario se jugará una prórroga de 30 minutos y de persistir la igualdad se definirá por tanda de penales.
Al igual que en mayores, se usará el videoarbitraje (VAR) y otras tecnologías para detectar fuera de juego y si el balón traspasó la línea de meta o no.
MPP