La plantilla del Real Madrid regresó a los entrenamientos en su ciudad deportiva, tras la exhibición en Anfield en el partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, con el foco ya puesto en el derbi madrileño del sábado ante el Atlético de Madrid, cuya preparación inició con las ausencias de David Alaba, Rodrygo Goes y Ferland Mendy.
La única buena noticia de la mañana para Carlo Ancelotti fue la recuperación total del francés Aurélien Tchouaméni, que regresó a los entrenamientos una vez superada la gripe, y se sumó a la recuperación del alemán Toni Kroos, que viajó a última hora a Liverpool e incluso pudo participar unos minutos en la recta final del partido tras dejar atrás un virus que le tuvo una semana de baja.
Los dos centrocampistas reforzarán al Real Madrid en el derbi y darán a Ancelotti opción para rotar en la medular. Sin embargo, el técnico italiano conoció tras las pruebas médicas realizadas al austriaco Alaba y al brasileño Rodrygo que no podrá contar con ellos tras confirmarse sus lesiones musculares.
Con la ausencia del francés Ferland Mendy, que apura los últimos pasos de su recuperación para reincorporarse a la dinámica de grupo, el técnico madridista vuelve a quedarse sin sus dos primeras opciones en el lateral izquierdo y tendrá que apostar por Nacho Fernández o volver a cambiar la demarcación del francés Eduardo Camavinga.
El resto de la plantilla madridista comenzó el entrenamiento con trabajo de fuerza en el gimnasio durante media hora y ya sobre el césped, según informa el club, completaron partidos en un campo de reducidas dimensiones y series de disparos a puerta.
Fue el primero de los dos entrenamientos que dispone el Real Madrid para una preparación más corta que el Atlético de Madrid del derbi. Desde las 11:00 horas del viernes, Ancelotti terminará de perfilar los cambios que introducirá en su equipo titular y buscará soluciones a las tres bajas confirmadas para el partido.
MPP