La Real Sociedad de San Sebastián sacó adelante este miércoles un complicado choque ante Osasuna (0-2) en Pamplona gracias a los goles de Mikel Oyarzabal y Mikel Merino, en un partido de octavos de foinal de la Copa del Rey marcado por la expulsión de Catena en el minuto 56, que condicionó el resto de la contienda.
Volvió la atmósfera de las grandes ocasiones a un Sadar que quiso revivir las emocionantes noches que dejó la Copa del Rey el curso pasado contra el Sevilla y el Athletic Club. Su rival, con varias ausencias de renombre como Kubo, Zubimendi o Traoré, se jugaba el todo o nada para acceder a los cuartos de final.
Osasuna salió más enchufado con Budimir y Arnaiz como principales armas. El balcánico fue la referencia en el juego aéreo, mientras que su compañero quiso exprimir su velocidad y su diabólico latigazo lejano. Barrene realizó el primer disparo de su equipo desde fuera del área en el minuto 12.
Con el paso de los minutos, los de Alguacil se fueron adueñando de la posesión, tratando de domar a unos rojillos motivados de vencer a la Real once años después. Budimir tuvo un cómodo disparo que el delantero no consiguió ejecutar con precisión.
La primera mitad fue igualada, pero sin ocasiones manifiestas de gol. Al igual que en el partido liguero de diciembre, ambos consiguieron anularse. Restaban 45 minutos para intentar no llegar a la prórroga, territorio en el que Osasuna se siente dominante.
El partido tomó un nuevo rumbo en el minuto 53. Hernández Hernández pitó pena máxima de Catena tras agarrón sobre Le Normand cuando el central se quedaba solo ante Aitor. Minutos después, el árbitro anuló la amarilla para mostrar la roja al defensor tras revisarlo en la pantalla.
El gol de Oyazarbal puso las cosas muy favorables para su equipo con más de media hora por delante con un jugador más. La entrada de Brais y Turrientes buscó mayor control en medio de campo para adormilar a un rival que también metió Peña y Rubén García en busca de lo imposible.
Los de Arrasate sacaron la casta para irse para arriba en un ejercicio de rebeldía. La Real buscó parar el ritmo local con posesión y efectivas pérdidas de tiempo que impidieron a los locales aprovechar ese pequeño empuje visto durante un tramo. Merino hizo el 0-2 en el 98 recogiendo el penalti fallado por Brais.
Finalmente, la Real Sociedad accedió a los cuartos de final de Copa del Rey tras vencer en Pamplona por la mínima para seguir acrecentando su espectacular racha de resultados contra Osasuna que se va a las once citas sin conocer la derrota.
Rja