Romelu Lukaku, el máximo artillero de la selección de Bélgica, se entrenó al margen de la plantilla el domingo, mientras la incertidumbre sobre su estado físico sigue ensombreciendo la preparación del equipo para el Mundial.
Lukaku, de 29 años, ha hecho dos apariciones como suplente en los últimos cuatro meses en su club, mientras lucha con una lesión en los isquiotibiales, y es poco probable que pueda jugar en los dos primeros compromisos de Bélgica en el Grupo F, contra Canadá y Marruecos, dijeron integrantes de la delegación el domingo en rueda de prensa.
Su situación se está evaluando a diario, y el objetivo es que esté disponible para el último partido del grupo, contra Croacia el 1 de diciembre, señalaron.
Lukaku es una pieza de referencia de una selección belga que espera estar a la altura de su segundo puesto en el ranking de la FIFA. El atacante ha marcado un récord de 68 goles en 102 partidos internacionales.
El lateral Thomas Meunier también se entrenó por separado mientras continúa su recuperación de una fractura de pómulo. Jugó 20 minutos en la derrota del viernes ante Egipto en un amistoso.