Fueron 45 minutos lo que le bastaron al Atlas para exhibir a Tigres y pegarle 2-0 en la cancha del Estadio Jalisco, evitando así que los hombres de Robert Dante Siboldi tomaran la cima de la competición.
Los Rojinegros de Benjamin Mora dieron uno de los mejores partidos del torneo, presionando la salida del rival, forzando errores y creando oportunidades sobre la portería de Nahuel Guzmán.
La contundencia aún es un problema, sin embargo, la generación fue tal en contra de los Felinos que bastó para dos goles que aseguraron los tres puntos, de lo contrario, el marcador pudo ser de escándalo.
El colombiano Juan Manuel Zapata continúa demostrando que cayó con el pie derecho en el fútbol mexicano, fue de lo más destacado, no solo en zona defensiva, también en el ataque colaborando con uno de los goles.
Los locales avisaron en el 24’ con Jordy Caicedo a las filtrado de Jaziel Martínez, el ecuatoriano se quitó de encima al guardameta, pero con el tiempo encima y el marco abierto la mandó por encima de la portería.
Eso no evitó que al 30’ cayera el primer tanto de la noche. Zapata con el tiro de media distancia, una de sus especialidades, logró vencer a Nahuel para desatar la locura en el Jalisco.
Sin Brian Lozano, cobrador oficial de los tiros de castigo, el colombiano tomó el balón en las afueras del área y la puso a primer poste del portero argentino que nada pudo hacer. Atlas estaba al frente y Zapata logró su segundo tanto del torneo.
Atlas cerró el juego tambor batiente. En el 33’ Caicedo con otro mano a mano, intentó poner el esférico por encima de Nahuel pero la mandó por arriba de la portería. El segundo gol era cuestión de tiempo.
Antes de ir al descanso los Zorros dieron el golpe que necesitaban antes de ir al descanso y fue Caicedo, quien aplicó la ley del ex y cumplió con su palabra de no celebrar ante su ex equipo.
Jaziel filtró el balón para el ecuatoriano que tomó adelantado a Nahuel y de pierna derecha colocó el balón dejando fuera de acción a portero para el 2-0 y la tranquilidad en el marcador.
En la segunda mitad los atlistas bajaron el ritmo buscando los espacios de Tigres que nunca encontró la forma de hacer daño a una de las mejores defensas del campeonato.
Debutó Marcelo Flores, aunque poco pudo hacer. Sobre el final del juego protagonizó un conato de bronca por un golpe sobre Javier Abella y fue todo para el último refuerzo Felino de la campaña.
Tigres fue exhibido en Guadalajara por un Atlas que demostró que una vez que regresen sus jugadores lesionados, en especial en la zona ofensiva, pueden ser de cuidado para cualquiera.
Rja