Ciro Immobile (minuto 23) y Nicolo Barella (42') en la primera parte, luego Lorenzo Insigne (66') y Domenico Berardi (73') en la segunda, concretizaron en el marcador el dominio de los italianos en el juego.
El viernes de la pasada semana, Italia ya había goleado en un amistoso, pero entonces fue ante una selección muy débil, San Marino (7-0).
El seleccionador Roberto Mancini alineó esta vez, ante otra de las selecciones clasificadas para la Eurocopa, un once que se parecerá probablemente mucho al que empezará el torneo contra los turcos.
Sin Marco Verratti, que se está recuperado de una lesión de rodilla y que fue suplido por Manuel Locatelli, la Nazionale dictó rápidamente el ritmo del partido con el impulso de Jorginho, reciente vencedor de la Liga de Campeones con el Chelsea y de Nicolo Barella, acelerador del juego.
Lorenzo Insigne, activo pero algo difuso ante la portería rival, y Ciro Immobile fueron los más presentes arriba. Ese último falló ocasiones (9, 28), pero tuvo el mérito de abrir el marcador, en el 23.
Gana así enteros en la selección y además dio la asistencia para el tercero de su equipo, el firmado por Insigne.
Entre medias, Barella había puesto en clara ventaja a Italia con un certero disparo y Berardi concluyó la fiesta, presenciada en las gradas por un millar de espectadores en el estadio Dall'Ara de Bolonia.
El partido sirvió para que el atacante del Sassuolo Giacomo Raspadori, la sorpresa de la lista de 26 convocados de Mancini, realizara su debut con el equipo nacional.
AZ.