El prodigio keniano Eliud Kipchoge se convirtió en la primera persona en cruzar la mítica barrera de las dos horas en un maratón, este sábado en Viena, en una carrera no oficial diseñada a medida para permitir la gesta.
Bien acompañado por un ejército de 'liebres' vestido de negro hasta los últimos 500 metros, el campeón olímpico de 34 años completó los 42,195 km en 1 hora 59 minutos 40 segundos, casi dos minutos menos que su récord del mundo (2 h 01 min 39 seg), fijado en unas condiciones homologadas en Berlín el año pasado.
En la capital austríaca, Kipchoge, con una camiseta blanca, comenzó el desafío a las 08h15 locales (06h15 GMT) y recorrió algo más de cuatro veces un circuito llano de 9,9 km.
"Me siento bien, mi objetivo era hacer historia. (...) Lo he intentado y soy el hombre más feliz en correr por debajo de las dos horas para inspirar a mucha gente, para decirle a la gente que ningún ser humano tiene límites", dijo el atleta al micrófono de los organizadores tras su hazaña, que compara con "caminar por la Luna" por primera vez.
"Estaba muy cómodo desde los primeros kilómetros. Me he entrenado para esto durante cuatro meses y medio e interioricé en mi corazón y en mi cabeza que correría el maratón en menos de dos horas", añadió.
"Los récords están hechos para ser batidos, así que otro intentará hacerlo, pero se ha hecho historia, es increíble", le felicitó su entrenador, Patrick Sang.
El desafío, que tuvo lugar en la antigua reserva de caza del Prater, en el centro de Viena, no se libró de las críticas, al ser considerado por algunos como un evento más mediático y comercial que deportivo.
AM