Si alcanzar un sueño suena difícil, llegar a dos en distintos caminos pareciera misión imposible. Seguramente todo se trata de aprovechar el tiempo al máximo, o al menos es lo que le ha funcionado a Fernanda Limón, futbolista de Atlas Femenil. Una soñadora con metas claras que ha dado los pasos en dirección correcta para poder cumplir sus objetivos.
Compaginar el estudio y el deporte resultan sencillos en comparación con la tarea de llevar prácticamente dos vidas. Fernanda no solamente es una pieza clave en la defensa rojinegra, sino que también es la coordinadora administrativa de una constructora. Así llegó a cumplir los dos sueños que tenía desde pequeña.
“Así como jugar futbol, como quedar campeona, como lo que sea, para mí el poder tener una carrera, un título universitario, para mí era un sueño. Como todos los sueños yo nunca lo dejé, luché por cumplirlo”, comentó Fernanda. La tapatía se ha realizado en los dos caminos que, según ella, le dan sentido a su vida.
Egresada de la UP en Administración y Finanzas, el inicio de Fernanda en el futbol no fue siempre de la mejor manera. De hecho, la defensa rojinegra acepta que no fue algo que le llamaba la atención desde el inicio. “Antes de que yo iniciara a jugar futbol en las calles a mí no me gustaba el futbol, yo odiaba el futbol. Mi hermana que es más grande que yo, a ella le gustaba el futbol y de repente jugábamos y a mí no me gustaba”, comentó.
A pesar de su renuencia inicial, Pérez Limón aceptó que su padre jugó un papel muy importante para que empezara a tenerle cariño a ese deporte. Una vez que lo consiguió, empezó a jugar, pasó por la selección Jalisco, triunfó en olimpiadas nacionales y así descubrió que tenía otro sueño por cumplir: llegar al profesionalismo.
Ante la ausencia de una liga profesional en el futbol femenil, Fernanda prefirió concentrarse en su carrera a pesar de los ofrecimientos de algunos clubes. “Antes de iniciar con mi carrera futbolística profesionalmente, ya había tenido oportunidades de estar en otros equipos, pero me quedaban año, año y medio de carrera para finalizar mis estudios y siempre tuve muy claro que siempre que quería terminar mi carrera y después estar en la liga” aceptó la jugadora.
Afortunadamente para ella, pudo encontrar un trabajo con la flexibilidad necesaria para poder desempeñarse en sus dos pasiones. Lo complicado puede ser sobrellevar los dos trabajos, pues, aunque confesó ser muy organizada, hay semanas en las que no tiene días de descanso, además de lo largos que suelen ser sus días; desde las 6:30 de la mañana hasta las 8 de la noche que llega a su casa.
A pesar de haber logrado sus sueños de manera sólida, Fernanda todavía sigue pensando en el futuro y se sigue poniendo objetivos en el futuro: “Uno de mis objetivos a largo plazo es estudiar una maestría. Siempre lo he querido y ahorita está en pausa por mis horarios y todo”.
Por otro lado, en el futbol, también lo tiene muy claro: “Hablando deportivamente uno de mis objetivos es quedar campeona con Atlas. Es un equipo al que le he tomado mucho cariño, es un equipo que me abrió las puertas. La institución desde el día uno me apoyó y más que nada por el equipo que hemos formado. Somos una familia y todas anhelamos con ese campeonato”.
Fernanda no descarta combinar ambas pasiones una vez que termine su carrera como futbolista. Ya ha pensado que con su conocimiento dentro de la administración y finanzas podría formar parte de la directiva de algún club o de la propia federación, pero la realidad es que por más ambición que tenga, siempre se caracteriza por pensar en su presente.
Será difícil que alguien se atreva a retarla, a decirle que es muy difícil conseguir algo. Fernanda Limón tiene sus objetivos claros y la clara motivación de haber conseguido ya un par de sueños. Se sabe capaz de todo.