Con apenas 14 y 15 años, las hermanas Suri, Mía y Lía Cueva han irrumpido con fuerza en los clavados mexicanos y ya suman más de 50 medallas de oro en distintas competencias nacionales e internacionales.
Su meta es clara: representar a México en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 y subir al podio.
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Las jóvenes clavadistas jaliscienses fueron entrevistadas en TELEDIARIO, donde compartieron sus inicios en la disciplina. Suri, la mayor, contó que llegó a los clavados tras practicar gimnasia y sentir curiosidad por los entrenamientos en el CODE Jalisco.
“Un día mi entrenador me aventó desde la plataforma y se me quitó el miedo”, recordó".
Poco después, sus hermanas gemelas se sumaron a la práctica y comenzaron a destacar juntas. Actualmente compiten en sincronizados desde los tres metros y también en pruebas individuales.
Este año lograron muchos éxitos, desde el Mundial Juvenil de Singapur, además de preseas en Olimpiada Nacional, Juegos Panamericanos Junior y Copa del Mundo en Guadalajara.
El futuro de los clavados mexicanos
Las hermanas reconocieron la fortaleza de las potencias mundiales como China, pero aseguraron que su preparación mental y física está enfocada en competir contra las mejores.
“Queremos ganarle a todas, no solo a las chinas”, subrayó Suri.
El retiro de figuras como Iván García, Germán Sánchez y Alejandra Orozco dejó un vacío en la selección mexicana de clavados. Para entrenadores y especialistas, el talento de las Cueva representa la continuidad de una disciplina en la que México ha brillado históricamente.
Con entrenamientos diarios, el respaldo de sus padres y el consejo de clavadistas consolidados, las tres jóvenes confían en que este ciclo olímpico será el inicio de una trayectoria internacional.
“Que otros niños se animen, porque todo vale la pena y los sueños se cumplen”, dijo Mía.
Las Cueva saben que el camino será largo, pero su presente ya las coloca como referentes de la nueva generación de clavadistas de México.
- Club Guadalajara
Con disciplina, trabajo constante y un talento que ya brilla a nivel internacional, las hermanas Cueva no solo representan el futuro de los clavados mexicanos, sino también un ejemplo de perseverancia para toda una generación.
Su historia demuestra que los sueños se cumplen cuando se combinan pasión, esfuerzo y constancia, y que México tiene ya a sus nuevas estrellas listas para dejar huella en Los Ángeles 2028.
KH