Se acabó la espera. Saul Alvarez y Gennady Golovkin vencieron a su último adversario y están listos para arrancar una batalla que promete será histórica por el ángulo por donde se le busque.
La cita en la explanada de la T-Mobile Arena, sede del tercer combate entre ambos, estaba pactada para las 13 horas de Las Vegas. El sol caía a plomo, pero ni eso mermó al millar de aficionados, mexicanos en su mayoría, para presenciar el último escalón antes de la grandiosa función.
Después del pesaje de todas las peleas preliminares, fue poco antes de las 14 horas cuando llegó el momento estelar.
Primero fue GGG quien llegó al escenario, desatando una oleada de abucheos por parte de la mayoría del respetable. El de Kazajistán no tuvo problema frente a la báscula y arrojó 167.7 lbs.
El doble campeón de Peso Medio lució confiado y dejó en claro que no teme al poderío del ‘Canelo’ al asegurar que “no tenia comentarios” ante los comentarios de Saul sobre que buscaría acabar la pelea antes de los 12 asaltos.
“No veo nada nuevo en su mirada”, remató el kazajo.
Y sí, luego la explanada de la T-Mobile explotó. Saul Álvarez hacia su Presentación en el escenario. Ataviado de una pijama completamente en rojo, camino hacia la báscula no sin antes saludar y fundirse en un abrazo con el presidente del CMB, Mauricio Sulaiman. Al final, el pugilista Tapatío arrojó 167.4 libras. Todo listo.
“No necesito que él (Golovkin) vea algo nuevo en mi mirada. Lo nuevo lo va a ver mañana (sábado)”, respondió el mexicano.
El campeón mundial mexicano está preparado para exponer sus cuatro cinturones más el de ‘The Ring Magazine’ ante el peligroso, pero también veterano Gennady Golovkin.