A quién no le gustaría haber jugador en el Real Madrid, considerado uno de los mejores clubes de futbol en el mundo, en el que grandes figuras han pasado por la institución.
Sin embargo, el ex entrenador de Chivas, Matías Almeyda rechazó la oportunidad de pertenecer al club merengue cuando era jugador en 1996, suceso que compartió en entrevista con Superfutbol.
"Estaba (Alfredo) Davicce de presidente y en ese momento, cuando me estaban buscando, todos los días subían la oferta por mí. Había aparecido el Real Madrid y otros equipos, pero yo le había dado mi palabra al Sevilla. Un día el presidente me llamó y me dijo que tenía que definir, porque los dos pagaban lo mismo", comentó.
Matías, jugaba para el River Plate, equipo que lo vio crecer desde 1992, año en el que debutó ante la Unión de Santa Fe; debido a su buen nivel despertó un gran interés en clubes importantes de Europa.
"Yo le dije que iba al Sevilla porque le había dado mi palabra. Me dijo ‘¿Usted está seguro de lo que está haciendo?’ y le dije que sí y me fui al Sevilla. Fui un visionario bárbaro: Real Madrid fue campeón y Sevilla descendió", apuntó,
A quién no le gustaría haber jugador en el Real Madrid, considerado uno de los mejores clubes de futbol en el mundo, en el que grandes figuras han pasado por la institución.
Sin embargo, el ex entrenador de Chivas, Matías Almeyda rechazó la oportunidad de pertenecer al club merengue cuando era jugador en 1996, suceso que compartió en entrevista con Superfutbol.
"Estaba (Alfredo) Davicce de presidente y en ese momento, cuando me estaban buscando, todos los días subían la oferta por mí. Había aparecido el Real Madrid y otros equipos, pero yo le había dado mi palabra al Sevilla. Un día el presidente me llamó y me dijo que tenía que definir, porque los dos pagaban lo mismo", comentó.
Matías, jugaba para el River Plate, equipo que lo vio crecer desde 1992, año en el que debutó ante la Unión de Santa Fe; debido a su buen nivel despertó un gran interés en clubes importantes de Europa.
"Yo le dije que iba al Sevilla porque le había dado mi palabra. Me dijo ‘¿Usted está seguro de lo que está haciendo?’ y le dije que sí y me fui al Sevilla. Fui un visionario bárbaro: Real Madrid fue campeón y Sevilla descendió", apuntó,