Necaxa venció 2-0 al Atlas en el Estadio Jalisco y tiene pie y medio en la fiesta grande. Duelo que de igual forma será recordado al ser detenido tal y como marca ahora la regla en el fútbol mexicano, debido a los gritos discriminatorios en contra de los jugadores de los Rayos en tiempo de compensación.
Atlas lo tenía todo. Una victoria era dar un golpe sobre la mesa y estar con la liguilla al alcance de un triunfo más, pero Necaxa mostró más oficio y es nuevo líder de la competencia con 28 puntos.
El juego estuvo lejos de ser el más lucido esta temporada en el Monumental, la cancha tampoco ayudó. El concierto de la semana pasada y el juego del pasado miércoles de los Leones Negros la dejó en pésimas condiciones.
Resbalones, pases imprecisos y temor a la hora de ir por varias pelotas divididas fueron una constante. De dos equipos que llegaban dentro de los ocho primeros de la tabla general se esperaba algo más.
De hecho, la primera de peligro fue hasta el 34’, Camilo Vargas erró en su intento de jugar el balón con los pies fuera de su zona habitual, la dejó muerta para Ricardo Angulo en los linderos del área, pero el disparo se fue apenas por un costado de la portería.
Al aficionado atlista difícilmente le podrán quitar la ilusión de disputar la Liguilla a pesar del resultado del viernes por la noche, por instantes así lo cantaron desde la zona baja norte. La cosa es saber hasta donde le dará a los Zorros.
Facundo Barceló al 37’ la intentó de media vuelta con pierna derecha, pero Hugo González atajó abajo con mano derecha. Atlas tocó la puerta, pero no lo haría con más insistencia en el resto del encuentro.
Para el segundo tiempo mejoró Rayos, sobretodo a raíz del ingreso de Kevin Mercado, que por parcela izquierda hizo lo que quiso. Su velocidad fue letal para la zona baja rojinegra.
Así fue como al 72’ puso el centro para el primer gol. Balón a la espalda de Jorge Segura, medido para Mauro Quiroga, ni siquiera se tuvo que esforzar. Necaxa lo estaba ganando 1-0 con un remate de cabeza de su atacante. Problemas a la vista.
Tres minutos después les repitió la dosis, Mercado la tomó en cancha propia y salió disparado, Ismael Govea a duras penas pudo verle el número, el centro fue a segundo poste otra vez a la espalda de Segura y el remate de Quiroga, esta vez de pierna derecha y entre las piernas de Vargas. Necaxa lo tenía 2-0 y prácticamente en la bolsa.
Lo bochornoso se presentó en la compensación, ya que los aficionados comenzaron con el grito que la Federación busca erradicar, por lo que el colegiado Fernando Guerrero detuvo el juego un par de minutos como dice la regla. Las campañas previas que hizo Atlas y el comportamiento que había tenido la afición, quedó de lado.
Fueron hasta seis gritos, no solo a Hugo González, también en los lanzamientos de falta de los visitantes y para el árbitro, de parte de una afición que no supo mantener el respeto.
Los Zorros se quedaron con 21 puntos, Tijuana que sí ganó, ya lo alcanzó, aunque por diferencia de goles los tapatíos siguen dentro de los primeros ocho a la espera de que Pumas no sume en su visita al Querétaro ni Pachuca ante el Toluca el día domingo, pues los dos tienen igualmente 21 unidades.