Se acabó el invicto de Chivas en casa en este Apertura 2019. Necaxa le pegó 2-1 a los tapatíos y acabó así con dos partidos en liga y uno más de copa sin derrota del Guadalajara con su gente, todo esto en el cierre de la jornada 6 del campeonato.
Tomás Boy probó con algo diferente a lo que ofreció en últimos partidos, línea de cuatro en el fondo, Van Rankin volvió a la posición habitual de lateral por derecha, Ponce por izquierda. Isaac Brizuela regresó como extremo por derecha y lo distinto se veía con Alan Pulido volanteando por izquierda y Oribe Peralta como centro delantero.
Eso no evitó que la visita se fuera al frente en el marcador. Maxi Salas se dio la vuelta en un saque de manos ante la complaciente marca de Oswaldo Alanís y le pegó con rencor a segundo poste. Nada que hacer para Antonio Rodríguez, Necaxa daba la campanada al 10’ y el atacante demostraba por qué es uno de los líderes de goleo del certamen con cinco tantos ahora.
Fue un partido de complicaciones sobre la marcha para el Rebaño. Dos cambios obligados por lesión los que tuvo que hacer el Jefe, primero con Eduardo López y después Michael Pérez en la segunda mitad.
La polémica del VAR no podía quedar atrás. Al 28’ se analizó una falta sobre Alan Cervantes en el área de Claudio Baeza que finalmente Roberto García Orozco decidió no sancionar como penal.
Eso sí, antes de ir al descanso los Rayos hicieron la maldad, tampoco se trataba de un dominio claro de los hombres de Memo Vázquez, pero eran certeros cuando se paraban frente a la portería rojiblanca. Luis Gallegos se encontró con un balón en las afueras del área, la prendió de aire con pierna izquierda.
El juego estaba 2-0 y los abucheos no se hicieron esperar a la hora de escuchar el silbatazo del medio tiempo. Lo que fue una realidad, es que el ingreso de Dieter Villalpando por la ya mencionada lesión de Pérez le cambió la cara al Rebaño que comenzó a tocar la puerta de Hugo González hasta que logró el descuento. Fue al 64’ y gracias precisamente a Dieter. El centro vino pasado de Brizuela, Pulido no pudo rematar y Villalpando apareció para cerrar la pinza y descontar.
Con poco menos de media hora por delante, el empate se veía posible. Oribe y su pleito con el gol se prolonga. El delantero está por cumplir un año sin marcar y al 73’ tuvo una clara luego de un remate ortodoxo de media tijera en el área chica que González con mucha fortuna se encontró para atajar y mantener la ventaja para su equipo.
Para el cierre de partido Boy decidió echar toda la carne al asador con el ingreso de Alexis Vega, quien había tenido algunas complicaciones durante el calentamiento del entretiempo, probó y entró ante los gritos de los más de 39 mil aficionados en el estadio que reconocen el buen momento que vive. Pero ya no les alcanzó.
Chivas descansará en la fecha doble y Boy tendrá mucho que corregir antes de visitar al Cruz Azul en el Estadio Azteca el próximo 31 de agosto, mientras que los Rayos reciben a media semana a la escuadra del Toluca.