Adam Thielen, receptor de los Vikings, se está acostumbrando a disputar partidos relevantes e intensos ante Nueva Orleáns.
Está por jugar uno más, esta vez en plena Navidad.
“Sí, es una locura prepararte para enfrentarlos. Casi se siente como si jugaras contra un rival de la misma división”, explicó Thielen. “Es siempre un partido difícil, contra una defensiva muy dura que siempre nos dificulta las cosas. Supongo que todo será similar el viernes”.
Será el quinto duelo entre ambos equipos en cuatro años, incluyendo dos duelos de playoffs en los que Minnesota anotó el touchdown de la victoria en la última jugada.
Una victoria permitiría que los Vikings (6-8) festejen la Navidad manteniendo vivas sus escasas esperanzas de colarse en los playoffs. Para los Saints (10-4), un triunfo aseguraría el cetro en la División Sur de la Conferencia Nacional por cuarta campaña consecutiva.
Asimismo, Nueva Orleáns mantendría latente la posibilidad de ser el primer preclasificado de la Conferencia Nacional, si es que Green Bay pierde sus últimos dos partidos.
Sólo el líder de cada conferencia descansará en la primera ronda de los playoffs.
El perdedor comenzará 2021 hundido en una racha de tres derrotas consecutivas. Al menos, los Saints saben que de cualquier modo estarán en la postemporada.
Nueva Orleáns ha logrado al menos 10 victorias en cada una de las últimas cuatro campañas regulares, sólo para quedar eliminado antes del Super Bowl. Dos de esas derrotas en playoffs llegaron en tiempo extra. El primer tropiezo quedó sentenciado con un avance de 62 yardas de los Vikings hasta la zona de anotación, justo cuando se agotaba el tiempo regular.
Los reveses recientes de los Saints han generado presagios de que se estrellarán de nuevo en la postemporada. Pero el entrenador Sean Payton prefiere enfocarse en por qué este equipo debería estar listo para dar el siguiente paso.
“Amo la resistencia de este equipo. Ha vuelto, se ha recuperado de lo ocurrido en el año anterior y ha funcionado de nuevo este año”, dijo Payton en referencia a una seguidilla de nueve derrotas conseguida en la presente temporada. “Necesitamos llegar al Super Bowl para que la campaña se considere un éxito. Probablemente lo haremos”.