El Papa Francisco pidió hoy a un grupo de futbolistas y directivos del equipo Borussia Mönchengladbach ser “atletas de bien y de paz”, durante un encuentro en el Vaticano.
Antes de presidir su primera audiencia pública de los miércoles después de las vacaciones veraniegas, recibió a una comitiva de ese club que milita en la Bundesliga, el máximo circuito del balompié alemán, en una sala contigua al Aula Pablo VI.
Ante directivos, actuales y ex jugadores, cuerpo técnico y familiares, el pontífice mostró su gratitud por la “relación de amistad” que se ha creado entre el club alemán, especialmente su equipo de viejas glorias, y la Asociación Deportiva de los Empleados Vaticanos.
Recordó que ambos han disputado varios partidos en los últimos años, algunos en Mönchengladbach y otros en Roma.
“Su equipo se distingue por ser un equipo a medida de las personas, por así decirlo, un equipo que favorece a las familias”, constató.
“Es bello ver cómo las familias pueblan su Borussia Park y cómo se desarrollan programas e iniciativas deportivas y educativas para promover a los jóvenes, en modo especial a los desfavorecidos”, agregó.
Entonces los invito a continuar siendo “atletas del bien y de la paz”, algo de lo cual “el mundo tiene tanta necesidad”.
Luego, el líder católico recibió de regalo una casaca del equipo firmada por todos los jugadores con el número uno en la espalda y su nombre en alemán, “Franziskus”. Al final se tomó la foto del recuerdo con los participantes.