El Manchester United anunció este domingo el aplazamiento de su partido de la 34ª fecha de la Premier League contra el Liverpool a una fecha indeterminada, con motivo de la invasión del estadio esta tarde por aficionados que protestaban contra los propietarios estadunidenses del club.
"Después de una conversación entre la policía, la Premier League, el consejo del distrito de Trafford y los clubes, nuestro partido contra el Liverpool fue aplazado por cuestiones de precaución y de seguridad ligadas a la manifestación de hoy", escribieron los 'Red Devils' en su comunicado.
"Se mantendrán conversaciones con la Premier League para encontrar otra fecha para este partido", prosigue el texto.
Una de las principales consecuencias de este aplazamiento es que el Manchester City, que se habría proclamado campeón en caso de victoria del Liverpool, deberá esperar.
Si el partido no es reprogramado antes, el City, que se enfrenta al PSG el martes en semifinales de la Liga de Campeones, podría asegurarse el título el próximo sábado ante el Chelsea.
Miles de seguidores se dieron cita al recinto para manifestarse en los aledaños del estadio contra la familia Glazer, los impopulares propietarios del club, pero decenas de ellos lograron colarse en el césped del mítico estadio.
"Ustedes pueden comprar nuestro club pero no podrán comprar nuestro corazón ni nuestra alma", se podía leer en un cartel. Muchos de los hinchas portaban los colores verde y dorado, símbolos 'anti-Glazer' porque evocan al Newton Heath, club fundado en 1878 y que 24 años más tarde se convertiría en el Manchester United.
Los seguidores encendieron bengalas, se subieron a las porterías y a las gradas, cantando "Queremos la marcha de los Glazer".
En un contexto que ha sido siempre tenso con la familia estadunidense Glazer (propietaria del club) el reciente episodio del proyecto de Superliga europea, en la que estaban implicados los Red Devils, ha elevado la presión.
AZ.