CIUDAD DE MÉXICO.- El Manchester City gastó su último cartucho para hacer frente al Liverpool y lo perdió con una derrota ante el Wolverhampton (3-2), con un gol del mexicano Raúl Jiménez, que participó en una remontada liderada por Adama Traoré, autor de un tanto y una asistencia con las que dejó al equipo de Pep Guardiola a 13 puntos del líder con un partido más.
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Jiménez se encuentra en una de los mejores momentos de su carrera. Con el tanto al City, ya suma 17 esta temporada en partidos oficiales, los mismos que hizo el curso pasado pero con 14 partidos menos. Sin duda, el mexicano es una de las sensaciones de Inglaterra y frente al City, lo demostró.
Suyo fue el segundo gol, que sirvió para empatar el partido en el minuto 81. Aprovechó una asistencia de Traoré para marcar a placer el tanto del Wolves, que después acertaría otra vez en el 90 por medio de Matt Doherty para certificar la remontada de un equipo que llegó a perder 0-2.
Con un tanto más, Raúl Jiménez igualará su mejor registro anotador, el de la campaña 2013/14, en la que consiguió 18 goles en el América.
Mientras tanto, Jiménez saborea el que consiguió este viernes ante uno de los grandes de Inglaterra, que, tras el 3-2 final, salvo hecatombe del Liverpool en el segundo tramo del curso, se despidió del título de Liga.
Con sus máximos rivales por el título intratables, no podían fallar ante uno de sus verdugos este curso en la Premier League, que consiguieron ganar por segunda vez este curso al Manchester City.
Eso, no lo conseguían desde 1960.No lo consiguieron. Volvieron a caer en la trampa de Traoré, que en octubre ya se encargó de despachar al City con un doblete a domicilio y que repitió actuación excelsa pocos meses después. Y, todo, en parte gracias a una acción al principio que obligó a remar contra la adversidad a los hombres de Guardiola desde el minuto diez del encuentro.
La expulsión del portero brasileño Ederson fue clave. Una jugada de dos toques cambió el destino del Manchester City, que con un jugador menos no pudo sobrevivir a un encuentro muy complicado. El calvario comenzó con un pase largo desde del central Conor Coady a la espalda del argentino Nicolás Otamendi teledirigido hacia Diogo Jota.
Delante de Ederson, el portugués superó al guardameta con un sombrero y acabó en el suelo derribado por su rival. La expulsión, justa, condenó al City.
MC
CIUDAD DE MÉXICO.- El Manchester City gastó su último cartucho para hacer frente al Liverpool y lo perdió con una derrota ante el Wolverhampton (3-2), con un gol del mexicano Raúl Jiménez, que participó en una remontada liderada por Adama Traoré, autor de un tanto y una asistencia con las que dejó al equipo de Pep Guardiola a 13 puntos del líder con un partido más.
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Suyo fue el segundo gol, que sirvió para empatar el partido en el minuto 81. Aprovechó una asistencia de Traoré para marcar a placer el tanto del Wolves, que después acertaría otra vez en el 90 por medio de Matt Doherty para certificar la remontada de un equipo que llegó a perder 0-2.
Con un tanto más, Raúl Jiménez igualará su mejor registro anotador, el de la campaña 2013/14, en la que consiguió 18 goles en el América.
Mientras tanto, Jiménez saborea el que consiguió este viernes ante uno de los grandes de Inglaterra, que, tras el 3-2 final, salvo hecatombe del Liverpool en el segundo tramo del curso, se despidió del título de Liga.
Con sus máximos rivales por el título intratables, no podían fallar ante uno de sus verdugos este curso en la Premier League, que consiguieron ganar por segunda vez este curso al Manchester City.
Eso, no lo conseguían desde 1960.No lo consiguieron. Volvieron a caer en la trampa de Traoré, que en octubre ya se encargó de despachar al City con un doblete a domicilio y que repitió actuación excelsa pocos meses después. Y, todo, en parte gracias a una acción al principio que obligó a remar contra la adversidad a los hombres de Guardiola desde el minuto diez del encuentro.
La expulsión del portero brasileño Ederson fue clave. Una jugada de dos toques cambió el destino del Manchester City, que con un jugador menos no pudo sobrevivir a un encuentro muy complicado. El calvario comenzó con un pase largo desde del central Conor Coady a la espalda del argentino Nicolás Otamendi teledirigido hacia Diogo Jota.
Delante de Ederson, el portugués superó al guardameta con un sombrero y acabó en el suelo derribado por su rival. La expulsión, justa, condenó al City.