Luego de fracasar rotundamente en la liguilla del Apertura 2019, tras sufrir una dolorosa goleada ante América, Tigres no podía continuar con la misma plantilla, necesitaba hacer incorporaciones puntuales para mejorar su juego y, como consecuencia, tener mejores resultados en la cancha.
En la opinión de cada refuerzo, habrá que responder preguntas clave: ¿era necesario su fichaje? ¿El costo va de acuerdo al rendimiento? ¿Ha funcionado? ¿Se adaptó al equipo?
¿Era necesario? Sin duda. No se trata solo de quién es o de dónde viene, sino del perfil que tiene como futbolista. Hablamos de un jugador multifunción zurdo, que tiene buen disparo desde media distancia, movilidad para desmarcarse. Tigres se podría decir que tenía eso en Zelarayán, pero quizá el hecho de ser zurdo y mayor trayectoria fue lo que agradó para cambiarlos.
¿El costo va de acuerdo a su rendimiento? Se habla de 9 millones de euros, y hasta ahora definitivamente no ha valido la pena, en los juegos donde ha participado no logró productividad, pocos remates al arco rival, e incluso poco sacrificio para defender.
¿Ha funcionado? No. Tuvo un partido clave ante Alianza en El Salvador, esa era su gran oportunidad y la desperdició. Ricardo Ferretti prefiere dejarlo fuera de las convocatorias para incluir a Jordan Sierra, Francisco Meza o Julián Quiñones
¿Se adaptó al equipo? No ha logrado entender su rol dentro del equipo. Ser un jugador de 9 millones de euros no es sencillo, no se trata solamente de ser muy bueno, sino de entender que lo eres y trabajar como tal, esperar acarrear compañeros a un nivel alto, y no esperar a ser llevado.
Jordan Sierra: lo ficharon en 2017 cuando jugaba para Delfín de Ecuador, era parte de esa interminable lista de jugadores que el equipo tenía cedidos, y llegó por fin para el Clausura 2020, tras haber jugado un año con Lobos BUAP y otro en Querétaro.¿Era necesario? Sí. Sus características de pases entre líneas y libertad para soltarse desde el centro del campo no las tiene otro jugador que sea considerando constantemente centrocampista, podríamos hablar de Dueñas pero está casi perpetuo como lateral. Aporta al equipo una dinámica distinta al resto de jugadores.
¿El costo va de acuerdo a su rendimiento? Fue adquirido por una cantidad muy baja, Transfermarkt habla de 750 mil euros. Para este caso, la pregunta que podríamos responder es: ¿valió la pena cederlo durante 2 años? Y sí, sin duda.
¿Ha funcionado? Aunque tiene todavía pocos minutos, cada que entra a jugar como centrocampista se nota un estilo de juego diferente, que ofende sin perder la responsabilidad de recuperar la pelota. Cuando no funciona es en los momentos que se coloca como volante abierto por derecha, tal como ocurrió ante Alianza en la vuelta y versus New York City.
¿Se adaptó al equipo? Por estilo y compañeros, se ve compenetrado con lo que Tigres requiere, sobretodo cuando el equipo tiene la pelota. No cabe duda que fue una pieza que llegó no para ser titular indiscutible y la estrella del equipo, es un complemento ideal para aumentar las revoluciones del juego.
Raymundo Fulgencio: tras quedar desafiliado Veracruz, Fulgencio estaba buscando equipo y los clubes lo buscaban a él, se habló de León, Toluca e incluso América, pero fue Tigres quien se quedó con los servicios de este habilidoso extremo mexicano de 20 años.¿Era necesario? Lo primero que se debe ver para responder esta pregunta es que llegó para cumplir la regla de menores, y no ha fallado en eso. Sumado a esa situación, su desempeño como extremo lo han hecho ganarse un puesto no por el año en que nació, sino por habilidad.
¿El costo va de acuerdo a su rendimiento? Tras quedar libre con Veracruz, llegó sin un costo de venta como tal. Sí se tuvo que pagar una cantidad por derechos, y si es vendido antes de los 23 deben pagarse derechos de formación, pero sin duda el costo-beneficio ha sido bastante bueno.
¿Ha funcionado? Aunque el equipo tiene diversos extremos, él ha entrado para ofrecer un desborde, encare y centros que hace tiempo no se veían por la banda derecha, buen rendimiento que se ha reflejado en oportunidades de gol.
¿Se adaptó al equipo? Lo hemos visto poner pases para Gignac, entender cuándo encarar y en qué momentos deben bajar, y dentro del campo se entiende muy bien con los compañeros, hay que esperar que en su día a día sea una persona tranquila y muy profesional.
Luego de fracasar rotundamente en la liguilla del Apertura 2019, tras sufrir una dolorosa goleada ante América, Tigres no podía continuar con la misma plantilla, necesitaba hacer incorporaciones puntuales para mejorar su juego y, como consecuencia, tener mejores resultados en la cancha.
En la opinión de cada refuerzo, habrá que responder preguntas clave: ¿era necesario su fichaje? ¿El costo va de acuerdo al rendimiento? ¿Ha funcionado? ¿Se adaptó al equipo?
Nicolás “Diente” López: la contratación de este jugador se pactó desde verano del 2019, no llegó porque primero debía salir alguien de ataque, y no se fue ninguno. Tras la salida de Zelarayán, llegó el uruguayo y se convirtió en el primer refuerzo para Ricardo Ferretti.
¿Era necesario? Sin duda. No se trata solo de quién es o de dónde viene, sino del perfil que tiene como futbolista. Hablamos de un jugador multifunción zurdo, que tiene buen disparo desde media distancia, movilidad para desmarcarse. Tigres se podría decir que tenía eso en Zelarayán, pero quizá el hecho de ser zurdo y mayor trayectoria fue lo que agradó para cambiarlos.
¿El costo va de acuerdo a su rendimiento? Se habla de 9 millones de euros, y hasta ahora definitivamente no ha valido la pena, en los juegos donde ha participado no logró productividad, pocos remates al arco rival, e incluso poco sacrificio para defender.
¿Ha funcionado? No. Tuvo un partido clave ante Alianza en El Salvador, esa era su gran oportunidad y la desperdició. Ricardo Ferretti prefiere dejarlo fuera de las convocatorias para incluir a Jordan Sierra, Francisco Meza o Julián Quiñones
¿Se adaptó al equipo? No ha logrado entender su rol dentro del equipo. Ser un jugador de 9 millones de euros no es sencillo, no se trata solamente de ser muy bueno, sino de entender que lo eres y trabajar como tal, esperar acarrear compañeros a un nivel alto, y no esperar a ser llevado.
Jordan Sierra: lo ficharon en 2017 cuando jugaba para Delfín de Ecuador, era parte de esa interminable lista de jugadores que el equipo tenía cedidos, y llegó por fin para el Clausura 2020, tras haber jugado un año con Lobos BUAP y otro en Querétaro.
¿Era necesario? Sí. Sus características de pases entre líneas y libertad para soltarse desde el centro del campo no las tiene otro jugador que sea considerando constantemente centrocampista, podríamos hablar de Dueñas pero está casi perpetuo como lateral. Aporta al equipo una dinámica distinta al resto de jugadores.
¿El costo va de acuerdo a su rendimiento? Fue adquirido por una cantidad muy baja, Transfermarkt habla de 750 mil euros. Para este caso, la pregunta que podríamos responder es: ¿valió la pena cederlo durante 2 años? Y sí, sin duda.
¿Ha funcionado? Aunque tiene todavía pocos minutos, cada que entra a jugar como centrocampista se nota un estilo de juego diferente, que ofende sin perder la responsabilidad de recuperar la pelota. Cuando no funciona es en los momentos que se coloca como volante abierto por derecha, tal como ocurrió ante Alianza en la vuelta y versus New York City.
¿Se adaptó al equipo? Por estilo y compañeros, se ve compenetrado con lo que Tigres requiere, sobretodo cuando el equipo tiene la pelota. No cabe duda que fue una pieza que llegó no para ser titular indiscutible y la estrella del equipo, es un complemento ideal para aumentar las revoluciones del juego.
Raymundo Fulgencio: tras quedar desafiliado Veracruz, Fulgencio estaba buscando equipo y los clubes lo buscaban a él, se habló de León, Toluca e incluso América, pero fue Tigres quien se quedó con los servicios de este habilidoso extremo mexicano de 20 años.
¿Era necesario? Lo primero que se debe ver para responder esta pregunta es que llegó para cumplir la regla de menores, y no ha fallado en eso. Sumado a esa situación, su desempeño como extremo lo han hecho ganarse un puesto no por el año en que nació, sino por habilidad.
¿El costo va de acuerdo a su rendimiento? Tras quedar libre con Veracruz, llegó sin un costo de venta como tal. Sí se tuvo que pagar una cantidad por derechos, y si es vendido antes de los 23 deben pagarse derechos de formación, pero sin duda el costo-beneficio ha sido bastante bueno.
¿Ha funcionado? Aunque el equipo tiene diversos extremos, él ha entrado para ofrecer un desborde, encare y centros que hace tiempo no se veían por la banda derecha, buen rendimiento que se ha reflejado en oportunidades de gol.
¿Se adaptó al equipo? Lo hemos visto poner pases para Gignac, entender cuándo encarar y en qué momentos deben bajar, y dentro del campo se entiende muy bien con los compañeros, hay que esperar que en su día a día sea una persona tranquila y muy profesional.