Ricardo “Tuca” Ferretti vivió el duelo ante Uruguay con la misma intensidad como cuando dirige a los Tigres, a pesar de que por ahora en el DT interino del Tri.
Ferretti, quien se caracteriza por su fuerte carácter, se plantó desde el primer minuto de juego en los limites del área técnica para tener mayor contacto con sus jugadores y hacer sentirse en cada jugada.
El DT no paró de dar indicaciones, sobre todo a Hugo Ayala y Jesús Gallardo, para que no perdieran la marca y fueran los primeros en salir jugando.
El primer regaño fue para Jonathan dos Santos tras perder el balón en el medio campo, el jugador del Galaxy no tuvo más que ver a la distancia la rabieta de su entrenador e ir a buscar de nuevo la pelota. Al Tuca no le importa la jerarquía, nombre o apellido, a todos los trata igual.
Los goles de Uruguay lo dejaron congelado en la banca, cada que el balón se metía en las redes de Memo Ochoa el estratega solo se queda mirando fijamente al arco.
Ya con la derrota de 4-1 el Tuca siguió mandando indicaciones, no le importó que el marcador estuviera escrito, él quería ver la entrega de sus jugadores pues si bien está de interino en el banquillo, es el candidato más fuerte para quedarse al frente del Tri y desde ya empieza a ver qué jugadores le servirían y cuáles no en caso de mantenerse.
Al final se fue directo al vestidor dialogando con el Chima Ruiz, su auxiliar técnico, y que conoce a varios de los jóvenes convocados.