El delantero del AC Milan Zlatan Ibrahimovic entrenó el lunes con el club sueco Hammarby, mientras continúa la paralización mundial del fútbol causada por la pandemia de coronavirus, y un breve ataque de tos no pareció molestarlo mientras practicaba su remate.
El delantero sueco Ibrahimovic, quien es el máximo anotador de su país y posee una participación en el club de Estocolmo, se entrenó durante toda en la sesión, que tuvo una mezcla de sol brillante y breves chubascos de nieve y granizo.
Con Italia en cuarentena y la Serie A y otras ligas importantes de fútbol paralizadas en el futuro previsible debido a la pandemia de COVID-19, Ibrahimovic regresó a Estocolmo, donde las autoridades tienen un enfoque un poco más laxo.
Se ha permitido que muchas empresas permanezcan abiertas y todavía se pueden hacer reuniones de hasta 50 personas y muchos de los clubes de fútbol de élite del país vuelven a entrenar.
"Preguntó si podía seguir con nosotros y obviamente dijimos que sí. No sé cuánto tiempo va a entrenar con nosotros y eso obviamente depende de lo que ocurra en el mundo", dijo la semana pasada el presidente de Hammarby, Richard von Yxkull.
Cuando la sesión del lunes de Pascua estaba por acabar, el jugador de 38 años tuvo un breve ataque de tos mientras se preparaba para participar en un ejercicio de definición, pero se recuperó rápidamente y comenzó a patear con fuerza la pelota.
El delantero del AC Milan Zlatan Ibrahimovic entrenó el lunes con el club sueco Hammarby, mientras continúa la paralización mundial del fútbol causada por la pandemia de coronavirus, y un breve ataque de tos no pareció molestarlo mientras practicaba su remate.
El delantero sueco Ibrahimovic, quien es el máximo anotador de su país y posee una participación en el club de Estocolmo, se entrenó durante toda en la sesión, que tuvo una mezcla de sol brillante y breves chubascos de nieve y granizo.
Con Italia en cuarentena y la Serie A y otras ligas importantes de fútbol paralizadas en el futuro previsible debido a la pandemia de COVID-19, Ibrahimovic regresó a Estocolmo, donde las autoridades tienen un enfoque un poco más laxo.
Se ha permitido que muchas empresas permanezcan abiertas y todavía se pueden hacer reuniones de hasta 50 personas y muchos de los clubes de fútbol de élite del país vuelven a entrenar.
"Preguntó si podía seguir con nosotros y obviamente dijimos que sí. No sé cuánto tiempo va a entrenar con nosotros y eso obviamente depende de lo que ocurra en el mundo", dijo la semana pasada el presidente de Hammarby, Richard von Yxkull.
Cuando la sesión del lunes de Pascua estaba por acabar, el jugador de 38 años tuvo un breve ataque de tos mientras se preparaba para participar en un ejercicio de definición, pero se recuperó rápidamente y comenzó a patear con fuerza la pelota.